El Río Duero Soria cae eliminado en Almería con la cabeza muy alta
Los celestes compitieron de forma espectacular, pero no pudieron rematar la eliminatoria encarrilada una semana antes
Soria
No pudo ser. El Río Duero Soria luchó, plantó cara, jugó bien y rindió como para hacer merecimientos de alcanzar las semifinales de los play-off por el título, pero enfrente el Unicaja Almería despertó a los sorianos de su sueño, tras haber ganado el primer envite en Los Pajaritos, en los dos partidos disputados en el Moisés Ruiz almeriense, igualando la eliminatoria el sábado (3-2) y dando la vuelta a los cuartos de final el domingo en el tercer encuentro (3-1).
El segundo partido, primero en tierras andaluzas, cumplió las mejores expectativas del ‘Clasicazo’ de la Superliga Masculina de Voleibol en lo que fue un duelo de poder a poder y con alternativas para ambos conjuntos. Los sorianos llegaban con la sensible baja del central brasileño Igor Iuri Silva, el referente celeste en el bloqueo, pero los también centrales Mario Dos Santos Junior y Juanfran Frías suplieron esa faceta con creces, sumando 6 bloqueos cada uno. El primer parcial fue para el Río Duero Soria, en un largo 28-30. El intercambio de golpes prosiguió en los siguientes sets: 25-20 para Almería y 20-25 para Soria en uno de esos partidos para enmarcar, que hacen afición. En el cuarto estuvo la eliminatoria, ya que los sorianos desperdiciaron hasta tres bolas de set, partido y eliminatoria. Se rehízo el equipo de Manuel Belenguer para imponerse 30-28 y forzar el quinto set. En este, pronto Unicaja Almería se puso por delante, con un Río Duero Soria a remolque, pese a acercarse en el tanteador con enorme esfuerzo y buen juego, pero incapaz de neutralizar la desventaja: 15-12.
Con igualdad en la eliminatoria se llegó al definitivo tercer partido, de nuevo en el Moisés Ruiz. Otra vez se adelantó en el luminoso el equipo de Manolo Sevillano, con un 25-27 que presagiaba otro partidazo. Lo fue, pero adverso a los interese sorianos. El conjunto celeste jamás bajó los brazos, rindió de forma espectacular, compitiendo de tú a tú ante los almerienses, pero Unicaja Almería no bajó tampoco el pistón y con un 25-22, mandando desde el principio del parcial, pero con la rotación soriana remontando y llegando incluso a ponerse por delante, y un 25-21, con inicio de dominio soriano y reacción temprana andaluza, el equipo local le dio la vuelta al marcador. Se llegó así a un cuarto set, con el ser o no ser para el Río Duero Soria. Igualadísimo, con alternancias en la iniciativa en el luminoso, se fue desarrollando el juego hasta un crucial 21-21. Entonces se alejó Unicaja Almería, dos arriba, recortó Río Duero Soria, 23-22, y el equipo local no volvió a ceder, con dos nuevos puntos para cerrar la eliminatoria (25-22).
Enorme tristeza para el equipo soriano y su afición por caer eliminados, pero con tremendo orgullo por haber firmado una segunda vuelta de competición regular que les llevó a unas eliminatorias de play-off en la que sólo el potencial almeriense, exigiendo la mejor versión celeste, puso fin a un sueño que pareció (y era) alcanzable tras el 1-0 en el Pabellón de Los Pajaritos.