Rafael Sierra: "Toledo tiene que estar en la vanguardia o se convertirá en un cementerio"

Toledo

Cuando Roberto Polo cerró el acuerdo con el gobierno regional castellano manchego para traer a la monumental e histórica ciudad de Toledo su colección personal de arte moderno y contemporáneo, muchos dudaron de la viabilidad de proyecto, "había gente muy reacia que no creían en la posibilidad de integrar nuestra apuesta cargada de contemporaneidad con el pasado y las capas superpuestas que construyen Toledo", afirma Rafael Sierra, durante la visita que realizó al centro el programa "Hoy por Hoy Toledo" hace unos días, "pero Toledo acogió al Greco, un artista revolucionario para su época, y funcionó", asegura.

  En el Centro de Arte Moderno y Contemporáneo, están satisfechos con lo conseguido en estos dos años, a pesar del tremendo golpe que ha supuesto la pandemia, "hemos sido capaces de superponer una capa más en Toledo, de modernidad, frente a todo el patrimonio histórico que tenía" y, añade, "es muy emocionante haberlo consolidado".

Para celebrar los dos primeros años del Museo y la colección Roberto Polo en Castilla-La Mancha, sus gestores han organizado 2 exposiciones que permanecerán abiertas durante un año, 2 videocreaciones de Isabel Muñoz -premio nacional de fotografía- una de ellas dialogando con el lienzo de pared que recibe al visitante, mostrando restos romanos, visigodos, islámicos y cristianos, y otra formada por 263 dibujos a tinta realizados por Pierre-Louis Flouquet, considerado un artista degenerado por los nazis de entreguerras, más dados al culto a la belleza y la perfección.

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Sobre el futuro y la relación con la ciudad que acoge el museo, Rafael Sierra es claro, "un museo de arte moderno y contemporáneo era necesario desde hace tiempo en una ciudad como ésta, que ya tiene un pequeño itinerario urbano con obras de Chillida, Cristina Iglesias, Juan Garaizabal....y la guinda que supone este centro". Sobre el peso de la Historia y la necesidad de seguir avanzando adaptándose a los nuevos tiempos, Sierra lo tiene claro: "Toledo tiene que estar en la vanguardia o se convertirá en un cementerio. "Me cuesta trabajo entender como una ciudad, a la que nosotros comparamos con Venecia, ha estado tanto tiempo de espaldas al mundo moderno", y añade: "era una obligación del gobierno de la región abrir una ventana así"

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El museo es un potente contenido en un espectacular continente, un edificio cargado de historias y culturas, repleto de bellezas arquitectónicas donde de nuevo fluye el diálogo entre el pasado y el futuro.