El afectuoso discurso de un policía local hacia a un grupo de migrantes
Un policía local de La Laguna en Tenerife logró convencer a un grupo de casi ochenta migrantes de que volvieran al campamento del que escaparon, evitando que durmieran en la calle. Con un tierno y afectuoso discurso que ha sido muy aplaudido.
El policía Javier López intenta convencer a los migrantes de que vuelvan al campamento para no dormir a la interperie / Eric Pestano
Tenerife
El papel de un agente de la Policía Local de La Laguna fue determinante para convencer a un grupo de casi ochenta jóvenes migrantes a volver al interior del campamento en el que están acogidos. Los migrantes salieron del campamento de Las Raíces en La Laguna con la intención de no volver. Querían llegar a la península para terminar un largo trayecto que comenzó hace meses, cuando se subieron a una patera en la costa africana. Sin embargo, no podrán viajar a no ser que el Gobierno decida derivarlos, al encontrarse en situación irregular.
"Piénselo bien que pronto va a caer la noche y el frío les va a triturar", intenta convencerles un Policía Local de La Laguna en tono conciliador
"Intenten pensarlo, por lo menos vayan un momento al centro, coman, se preparan y mañana deciden con la luz del día. Dentro de poco será de noche y el frío les va a tritutar", explica un Policía Local de La Laguna en un tono conciliador. "En La Laguna no hay albergue, en Santa Cruz todas las plazas están ocupadas, lo más adecuado ahora mismo es que vayan a comer al centro y después se lo plantean a la ONG que está gestionando todo esto", le explica el Policía a los jóvenes. La actuación policial excelente logró calmar a los jóvenes y reingresarlos en el centro al menos hasta mañana.
"Piénselo bien que pronto va a caer la noche y el frío les va a triturar", el emocionante discuso de un policía local a los migrantes
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"No era momento de aplicar una técnica policial sino todo lo contrario, una técnica social y humana", explica Javier López. En el campamento no tenían la comida suficiente y decidieron irse a la calle, revela el policía local. "Pero conocemos la zona muy bien y sabemos que en unas horas bajan las temperaturas a cinco o seis grados", añade. "Logramos que volvieran a comer, hasta que no les dieron buena comida no nos fuimos del lugar", explica este agente con un comportamiento ejemplar.
La propia ONG que gestiona el campamento de Las Raíces, ACCEM, con capacidad para acoger a 2.400 migrantes, ha reconocido la escasez de comida y ha solicitado los recursos necesarios al Ministerio. Además, han confirmado a la Cadena SER que las carpas de plástico no tienen ningún tipo de calefacción. No obstante, los migrantes escapados huyen sin éxito del frío y de la escasez de comida con la intención de seguir su viaje hacia la península. ACCEM está empleandose al máximo con los recursos disponibles para paliar esta situación.
