Cordero pospone el fichaje de Óscar Castro para la ventana que viene
El director deportivo intentó hacerse con los servicios del mediocampista tinerfeño del Atlético, pero las gestiones han quedado aparcadas hasta el mercado siguiente
El isleño Óscar Castro, junto al atlético Mollejo en la celebración de un título como juveniles. / Cadena SER
Santa Cruz de Tenerife
El director deportivo del Tenerife, Juan Carlos Cordero, ha pospuesto para la ventana siguiente la posible incorporación a las filas blanquiazules del isleño Óscar Castro Dorta, un mediocampista del Atlético de Madrid del que existen inmejorables referencias en las oficinas del Heliodoro Rodríguez López. De hecho, pasó por los filiales del club.
El responsable de los fichajes en el representativo pretendía la incorporación de Óscar en este mercado invernal y abordó el caso directamente con los dirigentes de la cantera atlética, pero la operación ha quedado aparcada para más adelante. Cordero buscaba calcar el mismo procedimiento que con Adri Herrera, jugador al que firmó para mandarlo cedido al Zamora.
Al entender que Castro está aún en período de formación, la intención era hacerse con sus servicios en propiedad y, a continuación, hallarle destino. Fuentes del Tenerife aseguran que el interés en el jugador permanece, pero solo si consiguen hacerse con sus derechos federativos en verano.
Óscar es consciente de la intención de los blanquiazules, así como de los contactos que mantienen con sus agentes la UD Las Palmas y hasta dos conjuntos británicos (Stoke y Cardiff). Su escaso protagonismo en las filas del Atlético ha alimentado las opciones de que pueda salir de la disciplina rojiblanca, si bien en este mercado todas las gestiones emprendidas para este propósito han resultado infructuosas.
El interés en este jugador confirma el afán de Cordero en construir un proyecto a medio-largo plazo donde tengan cabida repatriaciones como ésta. De apenas 19 años, Óscar Castro Dorta destaca por su altura (1,81 metros), por su visión de juego y la precocidad que ha marcado sus pasos, hasta el punto de que haber sido convocado en varias ocasiones por las divisiones inferiores de la selección española. Es un mediocentro puro, físicamente muy fuerte y de corte defensivo muy potente e intenso. "Tiene un buen primer pase para superar líneas e iniciar el juego posicional en ataque", cuentan quienes le conocen.
Al Atlético arribó en 2017, llegó a su cadete, luego a su Juvenil B y a continuación al A. El año pasado se marchó cedido al Calahorra, desde donde se sumó a la nómina del primer filial colchonero.
Aunque no haya logrado su objetivo en esta ventana, Cordero ya se ha posicionado para un fichaje que interesa -y mucho- con vistas al curso que viene.
