Malestar en la FAMPA por la suspensión de las clases

Ávila

La suspensión de las clases por las consecuencias del temporal decretada por la Junta de Castilla y León ha afectado a 23.265 alumnos en la provincia de Ávila y ha generado malestar según denuncian desde la Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Ávila (FAMPA).

En la tarde del domingo los grupos de mensajería instantánea se llenaban de mensajes de padres sorprendidos por la decisión de la Consejería de Educación, que era comunicada pasadas las cuatro de la tarde, lo que dejaba poco margen a las familias para reaccionar.

El presidente de la FAMPA, Jesús Guil, asegura que ha trasladado el malestar del colectivo al director provincial de Educación, Santiago Rodríguez. "Estamos muy sorprendidos y no nos ha gustado nada esta medida, máxime cuando hemos recibido algunas informaciones en las que vemos que es una presión por parte de los sindicatos de profesores".

Jesús Guil cree que aunque la nevada ha sido significativa no justifica la suspensión de las clases, al menos en la capital donde el aceso a los colegios es perfectamente posible. "Los colegios tendrían que estar abiertos", defiende.

El delegado territorial de la Junta, José Francisco Hernández, asegura que antes de tomar la decisión se hizo una ronda de consultas con los alcaldes de la provincia, incluído el alcalde de la capital, Jesús Manuel Sánchez Cabrera y "se llegó a la conclusión de que lo más conveniente era suspender íntegramente la actividad docente".

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José Francisco Hernández confía en que mañana todas las rutas escolares podrán realizarse con normalidad para el desplazamiento de los alumnos a los centros.