Muere Pepe Barrero, fundador del 'templo' de los champis a la plancha de la calle Laurel de Logroño
Pepe Barrero, responsable junto a sus hermanos del Bar Soriano de la Laurel, ha muerto a los 65 años
El pincho de champiñón del Bar Soriano. / ASOCIACIÓN LA LAUREL
Madrid
La calle Laurel de Logroño se queda un poco más triste con la muerte de Pepe Barrero, uno de los fundadores del mítico Bar Soriano, el templo de los champis a la plancha. Pepe ha fallecido a los 65 años. El establecimiento es uno de los obligatorios en esta calle de pinchos de la capital riojana, pequeño, estrecho, y con la plancha de Pepe al fondo, siempre echando humo y repleta de champiñones de la tierra. La receta era sencilla: champiñón y gamba sobre una rebanada de pan. ¿O no era tan sencilla? El gran secreto es la salsa con la que se adereza sobre la plancha, un aliño que seguirán aplicando con esmero sus hermanos en el bar.
El funeral de Pepe Barrero tendrá lugar este sábado a las 12:30 horas en la iglesia parroquial San José Obrero de Logroño, según informa el diario La Rioja.
Uno de los chefs riojanos más afamados, Francis Paniego, ha tenido u recuerdo para Pepe Barrero en Twitter. "En La Rioja se nos ha ido un hostelero de raza, ¿quién no ha disfrutado alguna vez de esos champis del Soriano? Siempre en el recuerdo por su simpatía y buena hacer, un abrazo inmenso a la familia", ha escrito el chef del Echaurren en su red social.
Un clásico recomendado por un estrella Michelin
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El champi del Soriano es uno de los pinchos imprescindibles de la Laurel, y así lo recomendaba la ecuatoriana Caro Sánchez, cochef del restaurante Íkaro (última estrella Michelin de Logroño). Una delicatessen que le fascina "porque es muy simple y porque está hecha con un producto muy riojano". El pueblo de Pradejón, de hecho, es el mayor productor de champiñones de España. "Cada vez que alguien viene a visitarme, le llevo para allá", explica.
Para recordar a Pepe hay que regresar siempre al Soriano y volver a escuchar a sus camareros pronunciar como un mantra ese grito de guerra gastronómico que ya es un clásico: "¡Y dos más!", el aviso de los camareros a plancha para el siguiente pedido de los clientes.
