A juicio por tráfico de drogas
Trece personas se enfrentan a penas de cuatro años y medio de cárcel, entre ellos varios vecinos de Aranda, el dueño de un club de alterne y varias prostitutas que vendían parte de la mercancía a sus clientes
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Parte de la droga objeto de este proceso se distribuía en un club de alterne / Cadena SER
![Parte de la droga objeto de este proceso se distribuía en un club de alterne](https://cadenaser.com/resizer/v2/S27VWGC5OZOWBGVFI3AXPW46KY.jpg?auth=914656d8836624d95518111dd90cc8f34f1d215531e9e1ddd05dd7ef4623abfa)
Aranda de Duero
La Audiencia Provincial celebra el próximo martes la vista oral de un proceso donde se juzga a trece personas por sendos delitos de tráfico de drogas, varias de ellas con domicilio en Aranda.
En el procedimiento, que ha sido instruido por el juzgado de Lerma, se ordenaron varias intervenciones telefónicas y registros previa autorización judicial en septiembre de 2015, en tres viviendas de la capital ribereña, en las calles Pisuerga, Laín Calvo y San Esteban, así como en un club de alterne. En ellos encontraron elementos destinados al cultivo, elaboración y distribución de la droga, así como la intervención de cocaína, marihuana, hachís, y diversas pastillas azules, que todos los implicados varones decían que eran para el vigor sexual, explica el escrito de la Fiscalía.
En esas mismas fechas los agentes encargados de la investigación accedieron también a cuatro viviendas de Villalmanzo, donde residían los responsables de la compra y distribución de la mercancía, y a una nave de la localidad de Santa Inés. Fruto de estos registros, además de la droga y elementos relacionados con ella, encontraron más de 10.000 euros en diversos escondrijos. El fiscal menciona también a un proveedor “muy cuidadoso con todos sus actos, que no ha podido ser identificado durante la investigación”, que entregaba en Valladolid a uno de los procesados las sustancias estupefacientes, casi siempre cocaína, que la transportaba hasta Aranda y se la facilitara al club de alterne. Su propietario se las proporcionaba a tres prostitutas, que a su vez las vendían a los clientes. La Fiscalía pide para todos los acusados penas de cuatro años y medio de prisión.