Tachan los carteles de Muñoz con el color violeta del movimiento contra la violencia de género
Pedro Muñoz está acusado de intento de homicidido y de malos tratos continuados hacia su mujer, Raquel Díaz
Los carteles habían quedado en un establecimiento de la avenida de Valdés en Ponferrada / Radiobierzo
Ponferrada
Son los carteles de la última contienda electoral. Este día de Todos los Santos han amanecido tachados con una cruz de color violeta, muestra de la lucha contra la violencia de género y símbolo del feminismo.
La indignación por el caso judicial abierto por un presunto delito de violencia de género salta a al calle después de que Raquel Díaz haya podido declarar y dejar constancia de que Pedro Muñoz fue el causante de las lesiones que padece y que la mantienen en silla de ruedas, un testimonio presencial que Raquel pudo realizar verbalmente, aunque con las limitaciones que le permiten el daño cerebral severo que padece.
Raquel Díaz, desmontaba así la versión dada por su marido sobre lo ocurrido en la casa de Toreno en la que ambos se encontraban el 27 de mayo cuando según Muñoz "estaba viendo la tele, salió de la casa, se la encontró tirada en el jardín y llamó al 112".
La instrucción de la causa todavía continúa a la espera de los resultados de varias pruebas criminalísticas y que podrían presentarse en este mes de noviembre.
Recordamos que Muñoz sigue en prisión desde el pasado mes de junio, una prisión preventiva que no ha podido levantar a pesar de que lo ha solicitado en cuatro ocasiones.
Esta expresión sobre el proceso que se sigue en los tribunales rompe el silencio sobre una relación que la propia Raquel ha asegurado en su declaración que estuvo ligada a los malos tratos desde un principio y que ha dejado fuera del campo político a Muñoz, expresidente de Coalición por el Bierzo, exalcalde de Toreno y exconcejal de Ponferrada.
