"Estamos desesperados. Vamos a tener que tirar todo el género"

Bilbao

A solo cinco días de una de las fechas señaladas en el calendario para las floristerías, la orden del Gobierno vasco con el cierre perimetral de los municipios ha echado por tierra todas las previsiones de decenas de pequeños negocios. Se quejan amargamente de que llevaban días llamando al cementerio de Derio para tratar de organizarse, que habían hecho pedidos "más modestos" por la actual coyuntura, pero en ningún momento, aseguran, se les había advertido de que los bilbainos no podrían acudir al principal camposanto de la villa, ubicado en el término municipal de Derio.

La prohibición de salir del municipio ha supuesto un jarro de agua fría para Aitziber Ugarte, de Lorebai. "Estamos desesperados", ha contado en Hoy por Hoy Bilbao. "Con mucha precaución, habíamos comprado género porque en ningún caso se nos había advertido que esto podía pasar". De la misma opinión es Amaia Rementería, que regenta una floristería en Derio, y se mostraba "muy enfadada", "hemos pasado de cero a cien", protesta.

Pérdidas de hasta el 90%

Aseguran que las pérdidas pueden llegar al 90% y lamentan sobre todo, la falta de previsión. "No va a ir gente al cementerio las pérdidas son totales, vamos a tener que tirar todo el género", según Ugarte.

El Ayuntamiento de Bilbao va a facilitar el acceso controlado a las floristerías para que puedan depositar los ramos que hayan encargado los clientes. Una opción que es "residual" porque acudir al cementerio en Todos los Santos tiene mucho de ritual. "A la gente le gusta ir a limpiar el panteón, a recogerse con los suyos, no se trata de ir a la tumba, dejar las flores y marchar", como puede ocurrir en otras fechas señaladas como en el Día de la Madre, que sí se hacen encargos a domicilio.