Las redes vecinales que sostienen la lucha contra la pobreza

Madrid

Con la llegada del frío, del otoño, muchas familias siguen acudiendo a los locales de las asociaciones de vecinos de sus barrios a pedir ayuda. A finales del verano la Federación Regional de Vecinos de Madrid, la FRAVM, atendió a unas 15.000 familias en toda la región. Desde la FRAVM dicen que con la vuelta del verano hay asociaciones que se están reincorporando; ahora hay la mitad de despensas abiertas que en un junio, son 34 las que ya están funcionando, frente a las 63 que había en verano. Se ha reducido, aseguran, el número de familias atendidas a las que ayudan. Esperan un otoño complicado, "las perspectivas no son buenas, se va consolidado la precariedad", afirma Quique Villalobos, presidente de la FRAVM.

Esta mañana en Hoy por Hoy Madrid hemos estado en dos despensas solidarias. Muchas de ella, sin celebraciones, sin fiestas, en sus barrios -de ahí consiguen una serie de ingresos para poder destinarlo a la asociación- tienen dificultades para pagar el alquiler de sus locales; otras, sin embargo, no tienen aún local asignado, a pesar de que lo han solicitado al Ayuntamiento de Madrid. Este último es el caso de la asociación de vecinos de Moratalaz; de hecho se han manifestado en numerosas ocasiones frente a Cibeles para reclamar este local a la junta de distrito. "Al principio no nos respondían, luego que no eran como decíamos. Y al final silencio", critica la actitud del Ayuntamiento Fefa Álvarez, voluntaria de la Red de Cuidados de Moratalaz

Otro punto en el que hemos estado esta mañana, Aluche, donde sus vecinos llevan desde abril ayunándose unos a otros. Ahora, su asociación ayuda a unas 1.000 familias; reparten todos los sábados alimentos no perecederos, como leche, aceite, latas de conserva, y también productos para los más pequeños. "Resistimos gracias a la red que hemos formado", dice Ana del Rincón, presidenta de Asociación de Vecinos de Aluche. Esta mañana, de hecho, les ha llegado una donación de huevos y pan de molde. "Nos hemos cansado de llamar a Servicios Sociales, a veces nos han mandado a familias. Pero la respuesta es ninguna. No hemos tenido ninguna ayuda desde el minuto uno", critica.