La limitación a 30 kilómetros por hora comienza a funcionar en un millar de calles
El PP augura que la norma se incumplirá y critica que en algunas calles las distintas señales crean confusión
Las señales ya están ubicadas en las entradas de la ciudad en las vías afectadas / Radio Castilla
Burgos
Más de mil calles de la ciudad, las de un solo carril por sentido de circulación, ya tienen limitada su velocidad a 30 kilómetros por hora, como establece la nueva Ordenanza de Movilidad del municipio. Durante los últimos días, el Ayuntamiento de Burgos ha completado la colocación de señales verticales en estos viales.
Hasta 14 grandes carteles en las entradas de la ciudad advertirán de la limitación a 30 kilómetros por hora, además de la señalización propia en cada calle, y 20 señales advertirán de las Áreas de Tráfico Restringido en zonas residenciales, donde el límite de velocidad es de 10 kilómetros por hora.
Para la portavoz del equipo de gobierno municipal, Nuria Barrio, Burgos se incorpora a las ciudades que apuesta por la sostenibilidad y la salud de sus vecinos con esta medida, que aporta "más seguridad vial y reduce la contaminación". Sin embargo, para el grupo municipal del PP, la pacificación del tráfico urbano que pretende esta reducción de la velocidad no dará resultado. El concejal Jorge Berzosa augura que la norma se incumplirá sistemáticamente y critica la confusión que se genera cuando en algunos lugares hay una señal vertical de no sobrepasar los 30 kilómetros por hora y en el suelo aún permanece una de 50 por hora.
