Extremadura pide militares para seguir a los contactos estrechos
El consejero de Sanidad, José María Vergeles, lo ha destacado en el pleno de la Asamblea de Extremadura
Mérida
El vicepresidente segundo y consejero de Sanidad de la Junta de Extremadura, José María Vergeles, ha destacado esta mañana en su intervención en el pleno de la Asamblea de Extremadura que la atención primaria en la región se está "sobrecargando" por la segunda ola del coronavirus.
Por ello, se ha pedido la participación del ejército para que "nos ayude al control del confinamiento de las personas que son contactos estrechos" pero que "no son rastreadores" ya que el consejero ha asegurado que "nuestros rastreadores funcionan bien". Aunque el consejero no ha detallado en su intervención el número de militares solicitados por la región, sí que fuentes militares confirmaban a EFE que "cien militares de la Brigada Extremadura XI comenzarán a hacer un seguimiento a las personas que están en aislamiento domiciliario en Extremadura en los próximos días".
De esta manera, la brigada ha formado a cien militares mediante un curso online del Ministerio de Defensa y otro presencial en la Base General Menacho. Entre ellos, se encuentran algunos sanitarios y psicólogos, para realizar labores de seguimiento a los 6.000 confinados que hay actualmente en la región, además de los 3.000 que se prevé que se incrementen en los próximos días,
El consejera ha destacado también en el pleno de la asamblea que se está trabajando en otras acciones para paliar la intranquilidad de los ciudadanos frente al covid, como por ejemplo que las áreas administrativas de los centros de salud puedan atender las llamadas de los pacientes, pues son "numerosos" lo que muestran sus quejas por la tardanza en ser atendidos, ha añadido.
Vergeles ha reconocido también dificultades para contratar personal sanitario para la Atención Primaria, que ha achacado a un problema "estructural" de España, pero ha asegurado también un mantenimiento de los contratos, también los de enfermería que ahora concluyen, aunque "no se eliminarán contratos" sino que se hará el llamamiento por la bolsa de trabajo del SES, por lo que el puesto se mantendrá pero cambiará el profesional que lo realiza ya que "todas las enfermeras que están en la bolsa tienen derecho a trabajar".