"Las medidas que inciden en los derechos y libertades se deben tomar con exquisito cuidado"

Valladolid

Que la situación sanitaria derivada de la pandemia se está complicando no es ninguna novedad. Desde hace varias semanas, la famosa curva lejos de doblegarse, experimenta un ascenso inquietante que preocupa a los ciudadanos de a pie y quita el sueño a quienes deben tomar decisiones para que la incidencia de la Covid 19 se sitúe como mal menor en niveles asumibles que permitan su control.

Los confinamientos de, por el momento, pequeñas localidades se vienen sucediendo desde hace dias en Castilla y León, por no hablar de la situación de Madrid. El Gobierno autonómico ha decidido confinar esta semana a varios municipios, algunos de ellos como Íscar y Pedrajas, en la provinica de Valladolid, ya estuvieron, por cierto,  confinados en agosto.

Además de estas dos localidades, la Junta ha confinado a Sotillo de la Ribera en Burgos y a Pesquera de Duero en Valladolid. Este último municipio no contó ayer con el visto bueno del juzgado, que analizó las razones de la Junta para proceder al confinamiento. El juez estimó que los motivos no resultaban suficientemente concluyentes y en un auto anuló la orden emitida por la Junta por la que se confinaba a este pueblo, muy conocido por sus vinos.

Es lógico que ante este ir y venir de pronunciamientos de distinto signo, los ciudadanos estén desconcertados. Por eso, hemos pedido ayuda a Dionisio Fernandez de Gata, profesor de derecho administrativo de la Universidad de Salamanca.

Puedes escuchar la entrevista de La Ventana Castilla y León en el siguiente enlace.

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