Los huertos de la Fundación Soliss repartirán alimentos a 15.000 castellano-manchegos este año
Hay cinco huertos en la región, dos de ellos en la provincia de Cuenca
Los huertos solidarios permiten aportar productos frescos a las familias más necesitadas / CEIP Federico Muelas
Cuenca
La Fundación Soliss, a través de sus huertos solidarios, espera poder repartir productos frescos a unas 15.000 personas en la región este año, una cifra que ha aumentado por la crisis económica que ha traído la pandemia. En Cuenca disponen de dos huertos que gestionan dos colegios, el Federico Muelas de la capital conquense, y el San Gil Abad de Motilla del Palancar. En toda la región disponen de cinco huertos solidarios.
La idea de instalarlos surgió tras detectar una necesidad, según ha explicado el presidente de la Fundación Soliss, Eduardo Sánchez. Se dieron cuenta de que los bancos de alimentos proporcionan a las personas con necesidades económicas productos no perecederos, pero faltaban productos frescos, sobre todo verduras. Con estos huertos se consiguen dos objetivos, los niños aprenden a cultivar y a ser solidarios, y se ayuda a las personas con carencias alimenticias.
La Fundación aporta las semillas y los abonos necesarios. Sólo pone como requisitos que estén en lugares cercanos a poblaciones grandes para hacer más rápido el reparto de los productos y que las parcelas tengan agua para poder regar.
El colegio San Gil Abad de Motilla lleva participando en los huertos solidarios de la Fundación Soliss desde 2016. La directora del centro, Toñi Moratalla, asegura que los niños aprenden el oficio de horticultor y muchos valores, como la creatividad, la solidaridad o el trabajo cooperativo.
