Atauta: Singularidad en los vinos

RIBERA DEL DUERO

Nos asomamos en nuestro balcón a la Ribera a tierras sorianas, donde en Atauta, existe un valle único que constituye una joya enológica y etnoráfico donde hacer un buen vino es cuanto menos, lógico. En este preciso enclave se descuelga, literalmente, Bodegas Dominio de Atauta, con el propósito de reflejar en sus vinos todas las peculiaridades que es capaz de ofrecer la variedad Tinto Fino. Jaime Suárez nos cuenta la historia de esta bodega soriana. “Este año celebramos nuestro 20 aniversario, este es un proyecto que comenzó un empresario soriano y que quiso dar impulso a un terreno magnífico que estaba en esta zona. En el 2000 se construyó esta bodega, y estamos aquí elaborando unos vinos muy particulares con mucha personalidad que muestran la particularidad de lo que es el valle de Atauta”, cuenta.

Con viñas de más de un siglo de antigüedad, Atauta se caracteriza por ser una bodega noble, con mucho trabajo detrás de cada botella, y en un valle ya mencionado cuya singularidad hace que sean muchas las particularidades que acogen sus creaciones. “Lo que nos hace especiales es el viñedo viejo del valle, es lo que más nos diferencia. En él estamos gestionando unas 45 hectáreas de viñedo, de viñedos desde los 120 a los 170 años de edad, eso es lo que nos hace muy especiales. Este valle lo hemos divido en 25 subzonas con características propias, e intentamos buscar la expresión de la personalidad de cada una de ellas”, especifica Suárez.

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Ante tanta exquisitez, ¿cómo son los vinos de Atauta?. “En Dominio de Atauta tenemos una gama constituida en tres niveles, la selección de viñedos viejos, con un vino más asequible al público, nuestro vino bandera que es Dominio de Atauta que da sentido a todo lo que hacemos, con la elección de las mejores subzonas que anteriormente he comentado; es un vino más estructurado y con más personalidad y luego tenemos unos vinos de paraje donde hemos seleccionado las cinco terrúar más relevantes y con más calidad para llevarlos directamente al consumidor”, explica Jaime.

Pero si tuviéramos que elegir un vino con el que quedarnos, ¿cuál elegimos? “Tendría que ser con Dominio de Atauta porque es quien define la esencia del proyecto, es el vino que me hace levantar cada mañana y que representa los mejores terrúas de este valle, y el que mejor representa esta esencia es Dominio de Atauta”, sentencia.

En definitiva, hablamos de exquisitez. De buena ubicación. De calidad. De trabajo, de mucho trabajo, pero también de buen vino. Hablamos de Atauta. Hablamos de que los mejores momentos, se brindan, se viven y se beben.

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