El Elche pierde 3-1 en Fuenlabrada pero llega con opciones de playoff a la última jornada
Los ilicitanos tienen que ganar al Oviedo y que el Fuenlabrada pierda en Riazor con el Deportivo
El pivote del Elche Manuel Sánchez es agarrado por un jugador del Fuenlabrada / Elche CF
Elche
El Elche C.F. salió tocado del estadio Fernando Torres tras caer 3-1 ante el Fuenlabrada, pero no está hundido. El técnico franjiverde, Pacheta, comentaba tras la dolorosa derrota que "nos queda una última bala. Llegamos a la última jornada con opciones de disputar la promoción de ascenso y hay que levantar rápido la moral".
El Elche tiene que ganar el lunes al Real Oviedo en el Martínez Valero y que el conjunto fuenlabreño pierda en Riazor ante un Deportivo de La Coruña que se juega la permanencia. Los gallegos necesitan la victoria para tener opciones de eludir un descenso a Segunda B que sería dramático para el Dépor. Los ilicitanos deben apurar sus posibilidades ante un Oviedo que ya está salvado.
Un Pacheta que remarcaba la gran temporada de su equipo que partió de inicio con la permanencia como el objetivo prioritario, y explicaba que "estoy muy orgulloso de los chicos. Nada que reprochar a mis jugadores porque se dejan todo lo que tienen. Seguiremos empujando hasta el final".
Toda una declaración de principios de un entrenador que ha sabido exprimir al máximo individual y colectivamente una plantilla como la del Elche que ha contado con el quinto presupuesto más bajo de la Segunda División. La afición ilicitana ha sabido apreciar en su justa medida el esfuerzo y el espíritu competitivo de sus futbolistas y el magnífico trabajo de Pacheta y de su cuerpo técnico.
La derrota del Elche se fraguó en cinco minutos fatídicos. En el primer minuto de la segunda parte Jeisson anotaba el 1-0 tras un error defensivo franjiverde. Y por si fuera poco, cuatro minutos después, el colegiado sevillano Figueroa Vázquez decretaba penalti a favor del Fuenlabrada por manos de Jonathas. Lo ejecutó el ex del Elche Hugo Fraile y puso el 2-0 en el marcador. Ver para creer. Los de Pacheta no merecían un castigo tan severo, pero se pegaron dos tiros en el pie.
Jonathas de Jesús puso algo de esperanza al firmar el 2-1 tras convertir en gol un penalti por manos de Iribas. El Elche buscó la igualada con más corazón que cabeza y el Fuenla de Sandoval sentenció a la contra con una diana de José Rodríguez que significó el 3-1 definitivo. Queda la última jornada de la Liga regular y no está todo perdido. El presupuesto del Elche fue muy corto, pero el rendimiento del equipo ha sido alto. No hay que dejar de creer hasta que el árbitro pite el final el lunes 20 de julio ante el conjunto ovetense. Cosas más difíciles se han vivido en el fútbol.
