"En junio ha venido más gente que ningún otro año y si esto sigue así los fines de semana habrá problemas"

Puertollano

Se avecina una paradoja: el verano en que las lagunas podrán recibir a menos visitantes, porque el aforo está limitado a poco más de la mitad en todas las playas es precisamente el verano en que este Parque Natural tiene más tirón entre la gente. La alcaldesa de Ruidera, Josefa Moreno, señalaba en Cadena SER que el mes de junio ha habido más visitantes que en cualquiera de los años anteriores, y que este fin de semana se alcanzó la masificación, con las dificultades que ello comporta para el control tanto del aforo como del cumplimiento de las medidas de autoprotección

Las dificultades se agravan en el caso de  Ossa de Montiel, a cuyo término pertenece la mayor parte del parque. En el caso de Ruidera, las dos playas más importantes, Laguna del Rey y Colgada, cuentan con un solo punto de entrada y el control corre a cargo de dos vigilantes contratados por el Ayuntamiento, así como la limpieza. En este punto, Josefa Moreno se mostraba muy crítica con la falta de civismo de muchos visitantes, y también con la falta de limpieza en todo el parque hasta el día de ayer, lo que se tradujo en días anteriores en estampas que no se corresponden con un entorno que recibe anualmente cientos de miles de visitantes

La alcaldesa señalaba la importancia de hacer cumplir las normas, para lo que se ha instalado cartelería en todas las playas, y cumplirlas también en los numerosos alojamientos, establecimientos hosteleros y tiendas del pueblo. El riesgo es claro: al primer rebrote, todo el parque quedará cerrado

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En cuánto al dispositivo de seguridad presentado ayer, Josefa Moreno lamentaba que la Guardia Civil finalmente mantenga y no pueda reforzar la dotación de años anteriores, y lamentaba también que la Junta Rectora del Parque siga sin constituirse, porque esta paralización afecta también a la gran medida pendiente de adoptar de cara al futuro: la posibilidad de cobrar una entrada a todos los visitantes para poder ofrecer mejores servicios incrementando el número de aseos y sobre todo, construyendo aparcamientos que saquen los coches de los andenes

Una entrada que, en principio, no superaría los dos euros y que servirían para mejorar el mantenimiento general del entorno natural que más visitantes recibe anualmente en toda la región

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