Cuenta atrás al cierre de Compostilla, "la vergüenza de los políticos del Bierzo"
A 24 horas de la desaparición "oficial" de la térmica, los empleados de las contratas comparan los logros de los representantes de Teruel con la "inacción" de los politicos bercianos
Ponferrada
Después de 500 días de lucha, las plantillas de las siete empresas auxiliares de Compostilla dedicadas a las labores de mantenimiento, seguridad o limpieza de la central de Cubillos del Sil, desmontarán el martes el campamento reivindicativo que han mantenido a las puertas de la témica y que ha visto desaparecer "sin poder evitarlo" los 170 empleos.
"La dignidad nos permite decir que no tenemos ni rabia", apuntaba este mediodía uno de los operarios de Nervión, una de las contratas que se ha ocupado de la limpieza y que tiene 35 años trabajados a sus espaldas, un empleado al que la empresa intenta despedir con una propuesta de indemnización que, como el resto, ha rechazado en asamblea porque la consideran "indignante".
A Nervión les quedan dos meses de ERTE mientras que los operarios que quedan de MAESSA afrontan este lunes su penúltimo día laboral. Se van con el cierre "oficial" de la térmica en la que algunos llevan trabajando desde los 18 años y dejando a sus espaldas un panorama económico "sin futuro para los jóvenes", lamentan a las puertas de Compostilla. "Es vergonzoso que los políticos no hayan dado una solución, no es cuestión de mendigar, sólo es cuestión de que miren qué se está haciendo en Teruel. Aquí no hay políticos, hay mezquinos", sentencia uno de los afectados.
Es tan lamentable, dice el responsable de la Federación de Construcción y Servicios de CCOO en Ponferrada, Alfredo Peláez, que Endesa está dando unos cursos para el desmantelamiento "que nosotros ya tenemos", por lo que el dinero podría destinarse a cualquier proyecto de reactivación al tiempo que "se nos garantizaría a nosostros ese trabajo y no a otras empresas foráneas", añade.
Caras derrotadas por el tiempo y mensajes reiterados para un problema que lamentan, una y otra vez, parece olvidado a pesar de lo que ha sido para la economía de la comarca: "Una empresa como esta y no hacen nada. Una película, eso es la Mesa por el Futuro de León, esa es la credibilidad que tienen los políticos, no tenemos una salida digna y hemos dejado aquí la salud desde los 18 años", lamentaban.