Investigan a un hombre por maltrato animal en una instalación ganadera en Xixona
Los animales presentaban falta de higiene y de alimentación

Los agentes encontraron una perra de raza mastín español, con heridas en la piel y "moribunda" / Guardia Civil

Alicante
La Guardia Civil investiga en Xixona a un hombre como presunto autor de un delito de maltrato animal por la desatención generalizada que presentaban los perros y cabras que tenía en una pequeña instalación ganadera.
Según el SEPRONA, que ha levantado acta por 28 infracciones administrativas en materia de ganadería, los animales presentaban falta de higiene y de alimentación.
La investigación se ha realizado por la reincidencia en los últimos años que esta explotación había presentado, a lo que se han sumado las quejas de particulares que, de forma habitual, se encontraban animales sueltos y sin control deambulando por la carretera colindante, o que incluso atacaban a ciclistas y cazadores.
En la inspección, los agentes encontraron una perra de raza mastín español, con heridas en la piel y "moribunda", otra perra de raza mestiza con extrema delgadez y una cabra, agonizando, con heridas, sin comida y que además tenía que alimentar a dos cabritos.
Esta explotación no estaba registrada en el registro de Explotaciones Ganaderas y los animales carecían de documentación y tratamiento veterinario para las enfermedades que padecían.
El propietario, un hombre de 32 años, está investigado por un presunto delito de maltrato animal.
Otra intervención en Jacarilla
Por otra parte, la Guardia Civil de Jacarilla investigó, la semana pasada, a otro hombre, de 22 años, como supuesto autor de un delito de maltrato animal por "tener a su perro de raza American Staffordshire Terrier en pésimo estado de salud, con multitud de heridas en extremidades y orejas (que habían sido cortadas) y que apenas podía moverse", según el instituto armado.
El animal fue detectado por una patrulla cuando realizaba servicio por una pedanía de Orihuela. Enseguida, los agentes solicitaron colaboración de un centro de protección animal, que emitió un "informe veterinario por el cual se acreditó la gravedad de las lesiones y la mala situación" del can, "prácticamente en semiabandono y con signos de que pudiera haber estado destinado a peleas de perros".
El propietario carecía de seguro y licencia obligatoria para la tenencia de un perro de raza potencialmente peligrosa.