La Catedral acoge una celebración del Corpus con procesión claustral
Para reconocer la labor durante la pandemia, el Cabildo Catedral ha invitado a representantes de médicos, enfermeros, trabajadores de centros de mayores o policía, entre otros
Sevilla
La pandemia motivada por el Covid-19 dejará hoy jueves estampas singulares en la celebración litúrgica del Corpus Christi, pues la procesión de la Custodia de Arfe por las calles de Sevilla, en un nutrido y colorista cortejo, dejará paso a una procesión claustral por el interior de las naves de la Catedral, que contará con un aforo limitado: 611 personas, similar al que se estableció para la misa funeral del pasado jueves por las víctimas del coronavirus.
Así, con respecto a la misa, comenzará a las 10 horas y como consecuencia del reducido aforo, desde el Cabildo Catedral se ha instado a seguir la eucaristía por la televisión, ya que será emitida en directo por 7TV. Precisamente, para cumplir con las restricciones de público, el Cabildo "se ha visto obligado a reducir al mínimo" las representaciones de instituciones de Sevilla y de la Archidiócesis. De este modo, sólo serán invitadas las autoridades civiles, militares y universitarias, según informa la Archidiócesis en un comunicado.
Además, con el "deseo de reconocer la labor y entrega altruista" de las múltiples entidades y personas que han contribuido, y siguen haciéndolo, a "aliviar las necesidades y sufrimientos de tantos hermanos", está previsto que participen en la procesión dos personas en representación de profesiones consideradas esenciales durante esta pandemia, tales como médicos, enfermeros, trabajadores de centros de personas mayores, y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, entre otros.
Asimismo, para evitar la aglomeración de personas, el cortejo quedará reducido al Consejo de Cofradías, la junta de gobierno de la Archicofradía Sacramental del Sagrario, el Cabildo Catedral, el vicario general, el obispo auxiliar, el arzobispo y las primeras autoridades. El Santísimo Sacramento será portado por monseñor Asenjo, sin usar la portentosa Custodia de plata de Arfe que cada año cierra un numeroso cortejo integrado por representaciones de la inmensa mayoría de hermandades -penitenciales, de gloria y sacramentales-; con pasos de santos sevillanos, como San Isidoro, San Leandro y Santa Ángela de la Cruz y bandas de música y que precede a una escolta formada por un escuadrón del Ejército, en un recorrido jalonado por altares y escaparates decorados con motivos eucarísticos.
El arzobispo bendecirá a todos los fieles desde la Puerta de la Asunción de la Catedral, si bien, desde el Cabildo ruegan "encarecidamente" a los que quieran congregarse en la Avenida de la Constitución para recibir esta bendición, que guarden la distancia social. Por otra parte, la Octava posterior al Corpus Christi de adoración al Santísimo, con el tradicional baile de los Seises, también ha quedado suprimida.