Novena sesión extraordinaria del Gabinete de Crisis Cultural

Comparecientes:

Alicante

Juan Carlos de Manuel, Gonzalo Eulogio, Tomàs Mestre y Silvia Cárceles

(Des)orden del día:

• I. Max Cady (Robert De Niro) saluda cortésmente a Gonzalo Eulogio, que se acoge a la quinta enmienda y le castiga con el látigo de su indiferencia.
• II. Juan Carlos de Manuel interroga inquisitivamente a Tomás Mestre sobre su próximo rodaje con Luis Soravilla.
• III. Eulogio interpreta la versión underground de “Abogados al borde de un ataque de nervios”. Cuando finaliza su discurso, cual Julieta Serrano, obliga  a punta de pistola a un motorista a llevarle al aeropuerto al grito de “¡Rápido! ¡A Estocolmo!”.
• IV. El De Manuel se interesa por las posaderas de nuestro anterior invitado, que ha recorrido más de 1.100 kilómetros en bicicleta entre Santiago y Alicante.
• V. Pausa publicitaria. Voz en off: Juan Carlos de Manuel. «Querido Alicante (dos puntos), dadle todos Me gusta a la página de Gonzalo Eulogio Abogados y Asesores. ¡Pero ya!»
• VI. Tomás Mestre, que también se ha maquillado para asistir a esta sesión, hace una loa de las habilidades de Carlos Arcaya, ausente de la sesión, con la pelota, en un rapto de peloteo desaforado al jefe.
• VII. Pausa publicitaria. Voz en off: Juan Carlos de Manuel. «Los domingos, en Alicante Plaza, para servir a Dios y a ustedes, hago maravillas».
• VIII. Gonzalo Eulogio recuerda con cariño a su familia, que ya le ha pedido al completo que les haga la declaración de la renta: “Son más que Los Sabandeños”.
• VIX. El rapsoda Mestre se rapea el Poema 12 de Oliverio Girondo: «Se miran, se presienten, se desean...». El Pleno en pleno se pone en pie. Rechinar de caderas.
• X. Juan Carlos de Manuel se pone romántico al recordar a la ínclita concejala de Acción Social, Julia Llopis, mientras hace le una caidita de ojos...

Conclusiones:

“ - ¡Protesto! - No se admite. - Señoría, ¡protesto enérgicamente! - No ha lugar. abogada, su protesta ha sido anotada y constará en acta. - Protesto. - No se admite. - Protesto enérgicamente. - ¡Ah, bueno! si es enérgicamente entonces se reconsiderará” (Algunos hombres buenos, Rob Reiner, 1992).