Pepe Boscá: "Intentamos que el cliente pase por la óptica, ya que nuestro producto es algo muy personal"

Valencia

Pepe Boscá Ópticos es una de las ópticas de referencia en la ciudad de València. Lleva en funcionamiento más de 50 años y cuenta en la actualidad con un equipo formado por más de 20 profesionales. Son especialistas en óptica oftálmica, lentes de contacto y baja visión.

Durante el Estado de Alarma por el coronavirus, las ópticas fueron consideradas un servicio esencial, y por tanto han podido estar más o menos activas. Pero las medidas de seguridad han sido muy estrictas y el sector no estaba preparado.

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Pepe Boscá, dueño de la óptica, nos cuenta que permanecieron cerrados desde que empezó el estado de alarma, "ya que no podíamos ofrecer ni a nuestros trabajadores, ni a nuestros clientes la seguridad sanitaria necesaria. Por tanto, optamos por una postura de responsabilidad".

Sin embargo, la actividad no paró del todo: "Aunque en todo este tiempo hemos estado dando un servicio de urgencia de lentes de contacto y sistemas de mantenimiento", afirma Boscá.

"A la vez que ofrecíamos estos servicios, adaptamos nuestro establecimiento a las nuevas circunstancias y con todo lo necesario para que nuestro personal pudiera atender a los clientes con la máxima seguridad sanitaria (mamparas, mascarillas, pantallas faciales, guantes, limpieza y desinfección del local por una empresa especializada, etc.)"

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En cuanto se presentó la ocasión, y lo tuvieron todo preparado, volvieron a la actividad el pasado 8 de mayo. "Efectivamente, abrimos nuestras puertas en el momento que tuvimos todo lo necesario, hasta el último detalle, para poder atender en las condiciones más seguras posibles. La vuelta está siendo tranquila, ya que no hay libertad de movimiento, pero sin pausa".

En Pepe Boscá seguirán trabajando como siempre y se muestran esperanzados en poder ver de nuevo a los clientes.

La cercanía con el cliente

Aquellos clientes que hayan tenido alguna necesidad especial, como la renovación o reparación de unos cristales, uso de lentillas...) han podido ser atendidos igualmente gracias a las entregas a domicilio; "un servició que tanto ha crecido estas semanas por culpa del confinamiento y que es una parte del negocio que comerá terreno a la presencia del cliente en el establecimiento".

Pero este tipo de servicios crea distanciamiento con el cliente. "La entrega a domicilio siempre que ha sido necesaria, es algo que siempre ha estado presente en nuestra empresa. Pero nosotros intentamos que el cliente pase por la óptica, ya que nuestro producto es algo muy personal y precisa de ajustes por parte de nuestro personal especializado", afirma Boscá.

Garantías sanitarias

A día de hoy, toda persona que quiera acercarse hasta el establecimiento pruede hacerlo con total tranquilidad, ya que "lo hemos higienizado conforme a la normativa de seguridad sanitaria. Hemos hecho una limpieza y desinfección total del establecimiento (realizado por una empresa especializada). Hemos dotado la óptica de mamparas de protección y EPIS para nuestros trabajadores y nuestros clientes".

Además, mantienen un control del aforo con prioridad para las personas de más de 65 años y realizan una desinfección continua de gafas y mobiliario.

El futuro de las ópticas

Poco a poco vuelve la actividad económica a las ciudades, se van abriendo puertas, hay mayor movimiento de gente de un lugar a otro... Le preguntamos a Pepe Boscá por la recuperación del sector. "Pensamos que la recuperación del sector será lenta, como el resto de los sectores, pero esperamos, y, sobre todo, deseamos, que lleguemos a la normalidad (nueva normalidad) lo antes posible".

Con ese mensaje positivo nos quedamos...

(*) Crónica elaborada durante la Fase 0 del Estado de Alarma por coronavirus