Una sucursal para salvar el negocio

Roa

En situaciones excepcionales, detalles excepcionales. Esta crisis del coronavirus ha dejado muchas iniciativas solidarias pero también grandes gestos que reconfortan y hacen pensar que otro mundo es posible. Eso es precisamente lo que ha ocurrido con Viveros El Disco, de Roa. Esta pequeña empresa familiar se enfrenta a uno de los meses más importantes de su negocio, con la venta de plantas de huerta y hortalizas. De este mes de mayo podría decirse que depende su supervivencia. Pero la crisis del coronavirus ha lastrado hasta el punto de que no pudiera vender presencialmene en Aranda su plantas.

O eso es lo que parecía, porque no será así. Este sábado Viveros El Disco venderá sus plantas en la capital ribereña, bien presencialmente o con pedidos encargados de antemano que se entregarán ¿Dónde? En Joluga. El centro veterinario cederá sus instalaciones para que El Disco cree una pequeña sucursal. Rosa López, gerente de la firma raudense junto a Maxi, asegura que "ha sido una cosa muy especial para nosotros en estos momentos que estamos atravesando, y queremos dar un agradecimiento gigante a José Luis por permitirnos dar este servicio a nuestros clientes. Hemos estado cerrados pero las plantas no paran, y la temporada es mayo y es mayo, eso no puede esperar para ponerlo en otro momento".

Rosa y Maxi tienen una estrecha relación José Luis, gerente de Joluga, que ha permitido este bonito detalle. "José Luis es amigo personal y como sabe que no hay manera de ponernos en Aranda de ninguna manera, que no podemos dar servicio a domicilio porque esto es una empresa familiar y no podemos abarcar todo, decidió prestarnos su negocio para dar servicio a todo el mundo y respetando las medidas de seguridad", afirma López.

Por tanto, este sábado la clínica veterinaria Joluga, frente a Glaxo, pasará a convertirse en un pequeño vivero. Y no solo de plantas de huerta y hortalizas. También de corazones como el de José Luis, por tan generoso detalle.