"Al Punto" deja en la calle por sorpresa a sus empleados con despidos disciplinarios
El propietario del Restaurante ubicado en la calle La Paz de Ponferrada les comunica la extinción de sus contratos a pesar de estar en ERTE
El propietario del Restaurante les ha dicho que llevan desde enero haciendo mal su trabajo / Radiobierzo
Ponferrada
"Vejada, humillada, ofendida", así es cómo se siente Alicia, una de las tres empleadas que ha despedido el propietario del Restaurante Al Punto, ubicado en el centro de Ponferrada, y para el que trabaja desde que el establecimiento abriese hace casi un año.
Aunque a todos, incluido el encargado, que es familiar del dueño, estaban integrados en un ERTE, el propietario ha decidido comunicarles la extinción del contrato por causas disciplinarias, un motivo que no está, aseguran, basado en ninguna falta disciplinaria previa "ni evidentemente en la realidad", mantiene Alicia, la camarera del establecimiento, que considera que si no hubiese hecho fija hace seis meses.
"Es humillante y vergonzoso", dice Alicia quien asegura que se ha quedado sin capacidad de reacción porque no se esperaba que además hoy mismo recibiese ya la comunicación de la baja en la Seguridad Social, lo que supone que está en el paro. "Pero es que además, una de mis compañeras se queda sin la posibilidad de cobrar el desempleo y con dos hijos", añade, con lo que eso supone en un momento como éste en el que encontrar otro trabajo es imposible.
"Hemos trabajado como leonas para levantar el negocio, la cocinera haciendo diez y doce horas...y ahora nos deja en la calle con mentiras, y sin un duro porque ni siquiera nos ha dado lo que nos corresponde, cuando además estábamos cobrando del ERTE...es indignante", concluye.
En la comunicación que han recibido el propietario alega "la disminución continuada y voluntaria que se ha venido constatando de su rendimiento en el trabajo en los meses de enero, febrero y marzo, con relación al que venían ofreciendo anteriormente, lo que supone un incumplimiento muy grave de las obligaciones laborales conforme al Estatuto de los Trabajadores".
Tanto Alicia como sus compañeras desconocen si el encargado, familiar del propietario, también ha sido despedido, aunque él les ha dicho que sí. En todo caso, las tres acudirán a los sindicatos para que les echen una mano porque aseguran que no tienen dinero ni para un abogado.
