Confirmadas dos nuevas poblaciones de Desmán Ibérico
Un roedor insectivoro que vive en cuencas fluviales y que es un bioindicador de salud ambiental
Un ejemplar de Desmán Ibérico en una fotografía de archivo aportada por la Guardia Civil en actuaciones para la protección de esta especie / Cedida
Plasencia
En el año 2012 se presentaba el proyecto Life+ Desmania y para muchos, ese fue el primer momento en el que conocieron que existe un pequeño roedor, el Desmán Ibérico, que es un bioindicador de la salud de nuestras cuencas fluviales.
En Extremadura se mantiene población de este animal insectivoro en el norte de Extremadura, en gargantas del Valle del Ambroz, La Vera o el Jerte. Con este proyecto europeo se ha comenzado la financiación para recuperación de habitats de este animal debido al gran descenso de su población por acción humana de la contaminación de los cauces fluviales.
Esta semana la Dirección General de Sostenibilidad de la Consejería para la Transición Ecológica y Sostenibilidad ha confirmado la existencia de dos nuevas pequeñas poblaciones, de desmán ibérico en el valle del Ambroz. En concreto, la presencia de esta especie en peligro de extinción se sitúa en el río Balozano, en el municipio de La Garganta, y en la Garganta Ancha, en Casas del Monte.
Se ha detectado estas poblaciones por el estudio de muestras fecales recogidas por los técnicos de la consejería que luego se han analizado en la facultad de veterinaria de la UEX. Una manera no invasiva de ver si existe esta población, de las 12 muestras remitidas, 9 han sido positivas, confirmando científicamente la presencia del desmán ibérico en lugares donde hasta la fecha no se había podido verificar.
La Junta indica que la especie del Desmán Ibérico (Galemys pyrenaicus) figura en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y en el Catálogo de Especies Amenazadas en Peligro de Extinción desde el año 2001. Hoy su ámbito de distribución geográfica se restringe, además de Extremadura, a la parte francesa y andorrana de los pirineos y al norte de la península, en el Cantábrico y la costa gallega.
En nuestra región solo se conocen pequeñas poblaciones, siete parejas, al noreste de Cáceres, en algunos tramos de las cuencas del Tajo, Jerte y el río Ambroz, donde se han localizado estas dos nuevas poblaciones.
EL DESMÁN IBÉRICO ES SINÓNIMO DE CALIDAD AMBIENTAL
Por qué ese animal es un bioindicador, porque el desmán ibérico vive ligado a ecosistemas fluviales, en cauces de ríos y riberas de aguas poco profundas, torrenciales y limpias donde abundan los macroinvertebrados, insectos son muy sensibles a la contaminación, por lo que son utilizados para calcular los índices biológicos de calidad de las aguas.
Los hábitats que ocupa el Desmán han de disponer de agua de muy buena calidad, limpia, fría, sin contaminar y muy oxigenada, por lo que su presencia en estos lugares se asocia a los cauces mejor conservados y a la pureza y calidad del agua. La presión de las actividades humanas y el cambio climático suponen los mayores riesgos para esta especie.
La mayoría de estos tramos están incluidos en las Zonas de Especial Conservación Sierra de Gredos y Valle del Jerte, Río Tiétar y Ríos Alagón y Jerte y por tanto amparados por las directrices de los Planes de Gestión de dichos espacios protegidos.
