La respuesta del Gobierno a la "bonita carta" de un niño de Culleredo a Pedro Sánchez

A Coruña

La carta de Nicolás a Pedro ya tiene respuesta. El departamento de comunicación con los ciudadanos de la Presidencia del Gobierno acaba de enviar su contestación al niño de diez de años de O Burgo, en Culleredo, que ni corto ni perezoso dirigió una misiva a Pedro Sánchez en la que le pedía que hiciese un esfuerzo para que niños y niñas pudiesen salir en casa, tras más de un mes de encierro en casa.

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Nicolás pedía "cinco minutos al día" al menos "aunque solo fuera a la puerta del edificio" para poder hacer un paréntesis en el confinamiento. "Yo, por ejemplo, soy un niño muy movido, nervioso, y me estreso con facilidad, igual que muchos niños seguramente", le contaba en su carta al presidente del Gobierno de España.

"Si lo consigue sería el mayor regalo que me hayan hecho en la vida", relabata Nicolás. Y concluía: "Ya sé que nos tenemos que quedar en casa, pero, por favor, inténtelo".

La respuesta de la Presidencia del Gobierno

La carta de este niño de Culleredo no quedó guardada en el cajón. El departamento de comunicación con los ciudadanos de la Presidencia del Gobierno acaba de responder al pequeño y agradecer la "bonita carta" dirigida a Pedro Sánchez que su equipo ha leído "con interés".

La Presidencia del Gobierno le pide a Nicolás "un poco de paciencia" aunque en el siguiente párrafo le confirma que a partir del próximo lunes, 27 de abril, podrá salir "de forma limitada y con algunas condiciones especiales"; una decisión que se adopta "después de consultar con los científicos".

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La respuesta insiste en el llamamiento a la prudencia "para evitar que el virus se extienda de nuevo". Y añade: "Puedes estar seguro de que el Gobierno está trabajando sin descanso todos los días para proteger a todas las personas y que, en cuanto los expertos lo aconsejen, podrás volver a salir a la calle en condiciones seguras".

El equipo del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se despide de Nicolás con un "fuerte abrazo".

Ahora, el pequeño descuenta las horas para la llegada del momento en el que más de 40 días después podrá de nuevo pisar la calle, aunque sea en las condiciones anunciadas por el gobierno.