Solo tres de los seis 'alojamientos refugio' previstos por la pandemia están abiertos

Málaga

Finalmente, sólo tres de los seis establecimientos en la provincia de Málaga proyectados como 'alojamientos refugio' ante la crisis sanitaria están funcionando.En total, suman apenas una quincena de habitaciones ocupadas, sobre todo por trabajadores de la construcción; también han llegado a alojar a víctimas de la violencia machista.

SER Málaga ha contactado con los seis establecimientos incluidos en el listado del Gobierno para dar alojamiento a colectivos que lo necesitasen en la provincia durante la pandemia, como trabajadores del sector del transporte, sanitarios u operarios de la construcción. Son todos establecimientos de pequeñas dimensiones, y de ellos, dos no han llegado a abrir en Benalmádena y San Pedro de Alcántara, en Marbella. Y un tercero, una pensión de la capital, tras abrir en marzo ha vuelto a cerrar sus puertas por "problemas de personal" y escasa afluencia.

Así las cosas, son tres los alojamientos refugio operativos. Uno de ellos es el Hostel La Moraga de Poniente, en Málaga capital, un negocio familiar que actualmente alberga a 12 personas entre trabajadores de la construcción, sanitarios o una pareja de turistas irlandeses mayores que han optado por mantenerse confinados para evitar un posible contagio en la vuelta a su país. La posibilidad de "echar una mano" como servicio esencial y además "evitar el ERTE" a sus trabajadores llevó al director de este hostel, Alberto Capote, a mantener sus puertas abiertas. "Es un modo de poner nuestro granito de arena a todo este disparate y una forma de seguir teniendo el negocio abierto", explica.

Entre las medidas de seguridad que han tenido que poner en marcha por la pandemia, indica Caporte, se ha "reforzado la limpieza en los espacio comunes", se realizan "desinfecciones dos veces al día", o han reducido el horario de recepción.

Otro de los alojamientos refugio operativo es el hotel Boutique Costa del Sol de Torremolinos. Su director general, Julio García, se encuentra confinado en el establecimiento con su familia y dos empleados que van y vienen a diario. "Todos hacemos de todo, jardinería, pintura, limpieza, gestión admnistrativa", indica García. Este establecimiento sí se vio abocado a presentar un ERTE para parte de la plantilla; de sus 36 habitaciones, tiene ocupadas cuatro. Y también extrema las medidas de prevención para evitar contagios con "mascarillas, guantes", "el desayuno se sube a las habitaciones" y todo se sirve con cubiertos y platos "de plástico" que luego se desechan. El establecimiento cuenta con experiencia como hotel "refugio", en este caso para ciudadanos kuwaitíes que tuvieron que quedarse en confinamiento cuando se decretó el estado de alarma hasta que pudieron volver a su país, indica su director.

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El tercer alojamiento refugio abierto es el Hostal Alarcón, en San pedro de Alcántara, en Marbella. Tiene otras cuatro habitaciones ocupadas de las 18 con las que cuenta el establecimiento. Entre las personas alojadas se encuentan trabajadores de la construcción y parados de la hostelería.