El sueño aplazado de los olímpicos valencianos a los que Tokio espera
El aplazamiento de la doble cita de Tokio (Juegos Olímpicos y Paralímpicos) por la crisis del Covid-19 ha pospuesto el sueño de los valencianos que ya tienen su plaza asegurada y la incertidumbre de los que todavía se lo tienen que ganar
Valencia
El anuncio de la suspensión de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos previstos para este verano en Tokio y su posterior aplazamiento para el verano de 2021 ha dejado en todos los deportistas una sensación primero de alivio y de contratiempo después. Nosotros nos centramos en los deportistas de la provincia de Valencia que o bien tienen ya asegurado su pasaporte a Tokio, y que tendrán que esperar un año, o aquellos que todavía no lo tienen y pelearán hasta el final para llegar a la gran cita olímpica.
Todos estos deportistas que representarán a nuestra provincia aguardan ahora mismo, como todos, confinados; pero tranquilos porque saben que podrán seguir preparándose con el apoyo fundamental de la Fundación Trinidad Alfonso, que ha querido tranquilizarles reiterando su apoyo pese al aplazamiento de la cita olímpica, gracias a las becas concedidas a través del Proyecto FER a deportistas de la Comunitat Valenciana.
En la provincia de Valencia, hay cinco deportistas que ya tenían claro que este verano iban a estar en Tokio y que solamente ven cómo su sueño se retrasa un ano. Lola Riera estará en los Juegos Olímpicos; Héctor Catalá, Kim López, Sergio Alamar y Héctor Cabrera acudirán a la cita paralímpica. A los cinco les hemos 'visitado' -vía telefónica- para conocer de primera mano sus sensaciones tras este 'tsunami' que ha conmocionado a todo el mundo en general y, en este caso a nivel particular, a los deportistas olímpicos y paralímpicos.
Héctor Catalá, paratriatleta, discapacidad visual. "A mí me cogió en Abu Dabi porque empezaba la primera competición de la temporada, me venía bien para medirme en año olímpico. Tres días antes de la prueba, hubo un positivo y se canceló. Entonces vi un poco exagerada la medida pero, al venir a España y ver cómo estaba, lo entendí. Desde entonces tuve dudas de que hubiera Juegos. Yo hago esto porque me gusta mucho y es una prueba para mí. Cuando empecé no pensaba en llegar a los Juegos y lo hacía con pasión; y ahora lo mismo, seguiré con muchas ganas y aprovecharé este año que nos han dado para seguir preparándome. Y al fin al cabo no sólo me afecta a mí, como podría ser una lesión, sino a todos", explicó.
Lola Riera es una fija en la selección española de hockey hierba, que ya tiene pasaporte para Tokio. "Aplazarlo ha sido lo más sensato, hay que acabar primero con la pandemia. Como deportistas nos tenemos que adaptar a la situación; habrá que adaptar los planes de trabajo, pero que todo lo malo sea esto. Hablando con mis compañeras, lo peor que llevamos fue la incertidumbre hasta que confirmaron el aplazamiento, con las dudas después de si se hacían en primavera del 21, en el verano del 22 o, como al final ha sido, en el verano del 21. No hay que desanimarse, ni mucho menos. Nos da tiempo a llegar más preparadas y con eso hay que quedarse. Los años olímpicos son muy duros y a Tokio llegaremos con casi dos de preparación intensa. Dos años para corregir errores y llegar mejor", subrayó.
Kim López, lanzador de peso F12, discapacidad visual. "Lo primero es que están bien aplazados los Juegos, porque con esta pandemia era imposible pensar que se podía juntar a gente de tantos países en una ciudad y luego volvernos a casa. Pero a nivel personal en lo deportivo, iba a llegar en un buen momento, por tanto, a mí no me ha venido del todo bien, porque además tengo una lesión de la rodilla, que estaba aguantando para este verano pero ahora me tocará aguantar un año más. Mi sueño es lograr el oro. Sinceramente me veía muy bien, ahora mis rivales también tendrán un año para mejorar... pero también yo", afirmó.
Héctor Cabrera, lanzamiento de jabalina, discapacidad visual. "Es un sabor agridulce porque llevaba cuatro años preparando esta cita, para además quitarme la espinita de no lograr por poco la medalla en Río, pero es lo que tocaba sufriendo esta pandemia en todo el mundo. Lo que va a ocurrir con este cambio es que a partir de 2021 se concentarán hasta 2024 tres años muy duros e intensos, con dos JJOO (Tokio y París 2024), dos mundiales y dos europeos. Al retrasar un año los Juegos, mirando lo bueno, muchos de los jóvenes que vienen por detrás tendrán más opciones de ir. Y en mi caso, otra cosa buena. Yo esperaba llegar a este verano lanzando la jabalina 67-68 metros y el año que viene 70. Así que puedo pensar en llegar a los Juegos lanzando 70 metros. Para eso tengo un año por delante para trabajar muy duro", sentenció.
Sergio Alamar es un fijo en el equipo español de fútbol-5 para ciegos. "Estoy tranquilo porque la plaza la tenemos asegurada. Hubiese sido peor si hubiéramos tenido un clasificatorio en junio, Tienes que ganarte el puesto pero yo soy un fijo y, si no pasa nada, estaré allí. Aunque ése es un riesgo que ahora corremos todos, al poder lesionarnos o bajar el rendimiento. Esperemos que no pase. En lo personal, yo estaba en una buena forma física. En casa ahora estamos entrenando y manteniéndonos, y luego vendrán las pruebas para prepararnos cuando se pueda. Nuestro objetivo es conseguir una medalla en Tokio, con eso soñamos y para eso trabajaremos", recalcó.
Estos cinco deportistas tienen asegurado su pasaporte a Tokio. Pero no estarán solos como valencianos en la cita olímpica. Llegarán más, pero todavía deben lograr su clasificación. Unos lo tienen más fácil que otros. A continuación hacemos un repaso de todos nuestros posibles representantes valencianos.
- Ricardo Ten. Ciclismo paralímpico. Tiene garantizada su presencia en Tokio al 99%, sólo falta la oficialidad.
- Silvia Navarro. Jugadora de balonmano. Portera indiscutible en el equipo de las ‘Guerreras’, tenía previsto sellar su pasaporte hacia Tokio en este mes de marzo en un preolímpico que se debía haber jugado en Llíria. Se ha aplazado pero se tendrá que disputar esta competición entre cuatro selecciones (España, Suecia, Argentina y Senegal). Las dos primeras (todo apunta a España y Suecia) irán a Tokio.
- Eva Coronado. Nadadora paralímpica, discapacidad intelectual categoría S14. Lo tiene difícil pero cuenta con opciones.
- Maurice Eckhard. Ciclista paralímpico. También lo tiene complicado.
- David Levecq. Nadador paralímpico, discapacidad física categoría S10. El veterano deportista, de 35 años, tiene posibilidades.
- José Antonio Marí. Nadador paralímpico, discapacidad física categoría S9. Virtualmente se clasificó al conseguir la mínima.
- Sergio Martos. Nadador paralímpico, discapacidad física categoría S8. Lo tiene complicado.
- Enrique Alhambra. Nadador paralímpico, discapacidad visual categoría S13. Muy joven, a sus 15 años es una de las grandes promesas de la natación paralímpica.
- Pablo Cantero y Vicente Aguilar. Tienen opciones de ser incluidos en el equipo español de fútbol-5 para ciegos.
- Vega Gimeno. Jugadora de baloncesto de la Selección española 3x3. Lo tiene complicado.
Y después están los casos de Fátima Diame y Quique Llopis. La saltadora de Longitud y el vallista están pendientes de los IAAF World Rankings, que premia la regularidad como criterio por delante de la mínima que exige la federación. En el caso del joven atleta de Bellreguard, estamos hablando de una promesa, que ya es realidad, que está llamado a ser el sucesor de Orlando Ortega.
Y, por supuesto, hay que tener en cuenta a otros deportistas representantes de la provincia de Valencia, de los considerados más mediáticos, que no están haciendo planes para el verano de 2021 porque les espera Tokio, si sus seleccionadores cuentan con ellos como se espera: hablamos de Víctor Claver en baloncesto y Carlos Soler y Ferran Torres en fútbol. Además de otros que puedan destacar en los próximos meses.
Chimo Masmano
Redactor de Deportes en Radio Valencia