Elecciones contra la incertidumbre

Bilbao

Leí una vez que "para entender a un político basta saber dos cosas: lo que a toda costa quiere lograr y lo que a toda costa quiere evitar". Si Urkullu ha hecho bandera de su carácter previsible, deduzcan qué es lo que quiere evitar: la incertidumbre.

Explicó ayer el lehendakari que adelanta las elecciones al 5 de abril en beneficio de la sociedad vasca. Para ahorrarnos una campaña de 8 meses. Mi teoría es que quien quiere ahorrársela es él. Con las encuestas de cara, la economía estabilizada, los nuevos traspasos encarrilados, ¿para qué arriesgarse a cualquier imprevisto? Fíjense en la semana pasada. ¿Quién le iba a decir que un vertedero se derrumbaría, sepultando a dos trabajadores y poniéndole en el disparadero? Imagínen ocho meses más así: con Cataluña, los presupuestos en Madrid...lo que puede enredarse el panorama. Y sin mayoría en el Parlamento. Podemos no le ha dado garantias suficientes para acabar la legislatura sin sobresaltos. Ahí está la anunciada comisiòn de investigación por los contratos al grupo Montai o Zaldibar, que ya le está salpicando.

Así, como se despidió ayer: "Si no hay más, gracias y precampaña".