Catering, lavandería, limpieza... pero sobre todo, compañía

Valladolid

Con una población envejecida y un cambio en las necesidades de cuidados de las personas mayores, uno de los retos a los que se enfrenta la sociedad en estos momentos es al cuidado de sus mayores. Uno de los servicios más demandados de la dependencia es la ayuda a domicilio, una serie de servicios que han de prestas los ayuntamientos, aunque con financiación en parte de las comunidades autónomas. 

El principal objetivo es mantener la calidad de vida de estas personas, prevenir su deterioro cognitivo y no alterar su entorno de vida, es decir, que puedan seguir en sus casas. Hay diversas modalidades, con servicios de comida a domicilio, lavandería o ayudas al respiro familiar, al cuidador. Pero también se cuida del entorno, tal y como explica la Directora del Servicio de Iniciativas Sociales de la concejalía de Servicios Sociales del Ayuntamiento, Caridad Torrecilla.

Cuando una persona decide que necesita ayuda para resolver sus problemas de autonomía, es decir, afrontar las tareas básicas de la vida diaria, ha de solicitar su valoración de dependencia y en función del grado de deterioro que muestra, se le reconocen una serie de derechos. Esta parte corresponde a la comunidad autónoma y después interviene el ayuntamiento con la tramitación de la ayuda correspondiente.

En la actualidad no hay listas de espera, es decir, nadie que tenga reconocido el derecho a la ayuda a domicilio no cuenta con ello, aunque sí hay evaluaciones pendientes, expedientes que tienen los CEAS hasta que se les reconoce qué servicio recibirá.