La ordenanza sobre el vertido de purines invade competencias según la Junta de Castilla y León
El Ayuntamiento de Tábara muestra sus reticencias a anular la normativa municipal que aprobó el pleno del consistorio
Benavente
El Ayuntamiento de Tábara no parece dispuesto a anular la ordenanza sobre movimiento de purines que aprobó para alejar la actividad de granjas porcinas del municipio, tal y como le ha pedido la Junta de Castilla y León argumentando que la normativa invade competencias de la Administración autonómica.
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El consistorio ha recibido ya la notificación de la Consejería de Presidencia instando la anulación del acuerdo plenario por el que el ayuntamiento aprobó la ordenanza, pero el alcalde Antonio Juárez asegura que no lo harán sin conocer los informes que sustentan la decisión de la Junta de Castilla y León porque “no considera que se hayan extralimitado con la regulación”.
Para Juárez, el criterio de la Administración autonómica en este asunto obedece a un posicionamiento a favor de la industria cárnica porcina en contra de los intereses de los habitantes del mundo rural.