Juan Nájar, el fotógrafo del Hospital Reina Sofía, se jubila
Después de 27 años y más de 140.000 instantáneas, el hombre que ha documentado buena parte de la historia del hospital cordobés reconoce que la fotografía "me cambió la vida"
Entrevista a Juan Nájar fotografo del Hospital Reina Sofía con motivo de su jubilación
17:23
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Córdoba
inauguraciones, visitas oficiales, presentaciones de campañas … No es exagerado decir que en los últimos 27 no ha ocurrido nada relevante en el Hospital Reina Sofía de Córdoba que no haya sido recogido por la cámara de Juan Nájar, el fotógrafo oficial de la ciudad sanitaria, que acaba de jubilarse.
"La fotografía me cambió la vida"
Según sus cálculos, el archivo de la Unidad de Comunicación, a la que Juan ha pertenecido desde 1992, cuenta con cerca de 140.000 imágenes que han sido tomadas por él.
Fue un curso de Imagen y Sonido, en el entonces recién inaugurado instituto Ángel de Saavedra, el que le permitió abandonar la 5º planta en la que trabajaba como celador para incorporarse a la Unidad de Comunicación. “Aquello me cambió la vida”.
"En el quirófano no podías ser invasivo"
En esta entrevista, que pueden escuchar aquí íntegramente, Juan Nájar ha explicado que, al principio, el trabajo fundamental de un fotógrafo del SAS estaba en los quirófanos. “Hacíamos diapositivas de las intervenciones más destacadas que luego se usaban en congresos y en la Facultad de Medicina”. Juan reconoce que dentro del quirófano, cámara en mano, “tenía que procurar no resultar invasivo”, aunque, añade, “siempre me he sentido uno más del equipo”.
"No creo que pase por Córdoba otro cirujano como el doctor Concha"
Como fotógrafo clínico, Juan Nájar ha compartido muchas horas de trabajo con aquella generación de cirujanos que “levantaron el hospital y que hicieron lo que conocemos como el espíritu del Reina Sofía” . Entre aquellos “Coroneles”, como él los llama, Juan destaca la figura de Manuel Concha. “No creo que pase por Córdoba un cirujano de su calidad profesional y humana” asegura el veterano fotógrafo con lágrimas de emoción en los ojos.
También se ha emocionado, y mucho, al recordar a algunos de los pacientes con los que ha tratado durante estos años. Como Guillermo, uno de los primeros trasplantados de corazón. “Un hombre muy alegre, con el que hice mucha amistad, que incluso compuso unas sevillanas para mi hija que, lamentablemente, nunca le pudo llegar a cantar”.
"A veces, una sonrisa es mejor que un calmante"
Tampoco olvida Juan Nájar aquella campaña de fotografías que bajo el título de “Primera imagen” permitió a más de 60.000 familias, entre los años 2000 y 2014, disfrutar de la primera fotografía de su recién nacido. “Le dábamos la foto junto con un tríptico de vacunaciones y el poema ‘Nana de la cebolla’, de Miguel Hernández y las familias lo agradecían mucho”.