Alto Milagros, una oportunidad industrial
Este polígono, enclavado en un lugar estratégico a nivel de comunicaciones, permite a nuevas empresas asentarse con unas condiciones magníficas para desarrollar su labor
Milagros
En una época en la que la industria quiere seguir carburando, son muchas las empresas que, dado su buen momento de forma, han decidido ampliar sus instalaciones. O quizá, directamente hay quien también tiene en mente montar un nuevo negocio con mucho futuro, pero no a cualquier precio. Y no hablamos únicamente de costes económicos, porque son muchos los factores que se piden a la hora de instaurar una empresa en una zona industrial. El Polígono Alto Milagros cumple con todos esos requisitos.
Esta zona industrial ribereña, enclavada en un lugar estratégico en cuanto a comunicaciones se refiere (junto a la Autovía A-1, a 140 kilómetros de Madrid y de Barajas y muy cerca de Aranda) permite establecer todo tipo de empresas con la mejor comodidad posible. Lejos de polígonos industriales anticuados, poco cuidados o problemáticos en cuanto a accesibilidad.
Alto Milagros es una oportunidad dorada, fundamentalmente por esa accesibilidad ya mencionada y su fácil localización. Un lugar renovado, con empresas que se ‘asoman’ a la autovía por la que transitan miles de personas a diario, y con muchas características llamativas. Cuenta con infraestructura de telecomunicaciones, red eléctrica, zonas verdes, red separativa de aguas residuales y pluviales, red de abastecimiento mediante malla cerrada y alumbrado exterior público.
Uno de los factores más llamativos de este polígono es que las condiciones geológicas y geotérmicas son idóneas para cimentaciones en el suelo, con ausencia de sulfatos y altos índices de tensión admisible. Es por ello que diversas empresas de gran relevancia -y otras que ya están en construcción- ya se han implantado en el polígono. Además, hablamos de negocios limpios, ya que únicamente se permite la instalación de empresas con un compromiso mediambiental regulado y no contaminantes.
En definitiva, un lugar bien enclavado, con accesibilidad y visibilidad, nuevo, con visión y pensamiento mediambiental, con muchos servicios y empresas ya asentadas que demuestran que la rentabilidad de Alto Milagros es más que real.