Rulo y la Contrabanda, cómo hemos cambiado

La nostalgia siempre funciona bien en el pop rock. Y Rulo, con DNI Raúl Gutiérrez, abre el cajón del pasado para presentar su nuevo disco, ‘Basado en hechos reales’, que ya avanzó con el single ‘Verano del 95’. Independizado de su antigua banda, La Fuga, demostró que era su voz, su imagen y sus letras las que daban gasolina al grupo. Ahora con un sonido más suavizado pero igualmente pegadizo. Pero su historia musical empieza justo después de ese verano del 95.

Con ilusión y trabajo, un grupete de chavales de un pueblo de Cantabria, Reinosa, empezaron a acumular conciertos, grabar una maqueta y, por fin, en 1998 publicar su primer disco, ‘Mira’, que incluía temas que luego fueron recuperados años después, como ‘Por verte sonreír’. Rulo llevaba el peso de las letras y de la imagen del grupo, que no obstante tenía un limitado éxito regional. La cosa empezó a cambiar con su segundo álbum.

Aunque todavía con una pequeña discográfica, la banda empieza a tener un sonido más contundente y mejor producido en ‘A golpes de rock and roll’, de 2000, donde ya incluyen algunas de las canciones que mejor les representarían después.‘A golpes’ es un buen ejemplo, pero no nos resistimos a una ración doble de este Lp pinchando ‘P’aquí p’allá’.

No todo el mundo les conoce todavía, pero sin duda este disco es básico para identificar la esencia musical que encierra La Fuga, que apenas tardaba un año en volver con un nuevo disparo, ‘A las doce’, que presentaban con sus primeros videoclips, como el de ‘Conversación, habitación’.

Gracias al buen hacer del grupo, La Fuga consigue subir de nivel firmando con DRO, una de las grandes discográficas del rock patrio. Ahora ya cuentan con todas las herramientas para asaltar el cielo y lo hacen en 2003 con el disco ‘Calles de papel’ y su single, ‘En vela’.

El grupo empieza por primera vez a manejarse en la cresta de la ola. Sus colaboraciones con grandes voces del rock en español hacen que corra la voz y su música alcance incluso rincones internacionales. Aunque el estilo apenas ha cambiado en líneas generales, sí se nota mayor empaque en todos los sentidos y eso cristaliza en 2005 con el disco ‘Negociando gasolina’ y uno de sus singles más representativos, ‘Buscando en la basura’.

Envalentonado por la buena acogida que estaban teniendo y la fidelidad de un buen nutrido grupo de seguidores, La Fuga publica directos, grandes éxitos regrabados en acústico y deuvedés varios. También un nuevo disco, ‘Asuntos pendientes’, que se convertirá en el último de la formación clásica cuando entre discrepancias anuncian en 2009 que Rulo se va de la banda. La Fuga continúa hasta hoy con su camino musical con nuevos discos y nuevos proyectos, pero nos centramos ahora en Rulo y en la nueva autopista musical que se abría ante él cuyo primer peaje llegó en 2010.

Rulo y la contrabanda, como llamó al nuevo proyecto, se presentaba con ‘Señales de humo’, un disco quizá con menos potencia pero con mayor riqueza musical y lírica. Era necesario llegar hasta aquí pasando por el viaje musical del cántabro en su banda para radiografiar la evolución de un gran compositor que ahora ponía él solo el nombre y la cara en los carteles. Rulo cosechó un buen resultado y aprovechó la inercia con un disco en directo como antesala de ‘Especies en extinción’, que en 2012 presentó con ‘Divididos’.

Ahora en solitario Rulo se ha afianzado en el panorama rock, aunque cada vez con una producción un poco más convencional y pop, que ha dado brillo a sus temas con algunos de los mejores músicos de España, pero que carece de esos grandes himnos que compuso en el pasado. En 2016 publicó ‘El doble de tu mitad’ y con él nos vamos a despedir, de la mano del single ‘Me gusta’ que ejemplifica esa delicada producción en cada detalle.