El duelo más directo con alguna urgencia ya para el Valencia

Valencia

Es, en teoría, el duelo más directo que se encuentra el Valencia temporada tras temporada. Por lo menos de un tiempo a esta parte. Ya sea en Mestalla o en el Pizjuán, este enfrentamiento supone más que tres puntos, puesto todo lo que suma uno lo deja de sumar el otro; o lo que es lo mismo, una victoria en este choque entre rivales enconados puede valer seis puntos en vez de tres.

Y son precisamente seis puntos los que separan a ambos equipos ahora mismo en la tabla. El Sevilla tiene 19 puntos y el Valencia suma 13. El Sevilla se encuentra dentro de su objetivo, en la parte alta de la clasificación, mientras que el Valencia está en la zona media. Pero seis puntos a estas alturas de la temporada no es nada. Pero nueve, en caso de derrota, ya sería algo más preocupante.

Pese a la dificultad del momento, Mestalla es un campo tremendamente hostil para el Sevilla en cuanto a ambiente y también en cuanto a resultados. Quizá una cosa esté íntimamente relacionada con la otra, pero lo cierto es que el Sevilla ha perdido en siete de sus últimas visitas a Mestalla. Ganó 1-2 en la temporada 11-12, empató a cero en la 16-17 y a uno el año pasado.

El resto, todo victorias del Valencia, aunque eso sí, una de ellas fue una victoria ficticia porque realmente fue más que una derrota. Quizá se vaya olvidando poco a poco con el paso del tiempo pero aquel gol de M’Bia en el último minuto de la semifinal de Europa League fue uno de los palos más duros que se ha llevado la afición ‘ché’ en los últimos tiempos.

Recordábamos antes el último precedente que terminó con empate a uno, pero ahí sí que estuvo a punto de llevarse la victoria el Sevilla porque entraba en el tiempo de descuento por delante en el marcador. Era principios de diciembre, en el momento en el que el Valencia no ganaba casi ningún partido y que Marcelino empezaba a estar cuestionado por un sector de la afición. Pero llego un testarazo de Diakhaby en el minuto 92 y salvó un punto que supo a victoria.

De hecho, de haber conseguido esa victoria en Mestalla el Sevilla se habría puesto líder momentáneo y le habría sacado en ese momento trece puntos de ventaja al Valencia. Y luego ya saben cómo terminó la cosa al final de liga, con el Valencia cuarto, entrando en Champions y aventajando en dos puntos al Sevilla, que terminó sexto, por detrás también del Getafe.

Así que atendiendo a estos datos el Valencia, pese a no atravesar un buen momento, aún está a tiro de todo, puesto que el año pasado a estas alturas estaba peor clasificado tanto en liga como en Champions. Ahora tiene 13 puntos en liga y el año pasado llevaba 11; y ahora tiene cuatro puntos en Champions y el año pasado llevaba dos. Con lo que tiempo por delante para revertir la situación hay más que de sobra. Y el ejemplo del año pasado podría servir.

Pero para eso el Valencia actual debería corregir cuanto antes la sangría defensiva que está sufriendo últimamente. Los datos de los dos últimas partidos ante el Lille y Osasuna son tremendos. En Francia el Lille intentó 26 disparos a portería por solo tres del Valencia. Pero en Pamplona aún fue peor; 30 remates de Osasuna y de nuevo sólo tres de los de Celades.

Un Celades que se va a enfrentar a un amigo, a Julen Lopetegui, del que fue ayudante en el Real Madrid, con el que coincidió en la selección cuando el vasco era el entrenador de la absoluta y él de la sub'21, y que Albert ha manifestado que es uno de los entrenadores que más le ha influido en su forma de afrontar la profesión y además, que es uno de los mejores entrenadores de la Liga.

En el capítulo de bajas, muchas más en el Valencia que en el Sevilla. No pueden jugar por sanción Rodrigo y Cheryshev. El primero porque fue expulsado en Pamplona y tendrá que cumplir un partido de castigo, y el segundo porque vio en El Sadar la quinta amarilla del curso. Además, por lesión son baja Gameiro, Guedes y Piccini. El francés no tiene lesión como tal, pero sí unas molestias musculares que le obligan a descansar; al portugués se le ha complicado más de lo previsto su esguince de tobillo y sigue sin entrenar con el grupo; y al italiano no se le espera hasta 2020.

En el Sevilla siguen sin estar los dos centrales lesionados, el portugués Daniel Carriço y Sergi Gómez, y se han quedado fuera por decisión técnica el mediapunta Bryan Gil y el portugués Rony Lopes.