Aitor Fernández obliga a la Cultural a dar nuevas bajas

León

La nómina de fichajes de la Cultural asciende a ritmo de vértigo. Con Aitor Fernández son 16 las contrataciones realizadas, aunque no todos los llegados seguirán en la disciplina culturalista. Aitor, de 33 años, le dará al lateral derecho la experiencia necesaria a una demarcación en la que el joven Juan Rodríguez necesita tiempo para crecer. Tal y como adelantó Radio León, Aitor era el gran candidato para mejorar un puesto que se había convertido en el centro de las miradas. Tras ser descartado por el Extremadura UD en las dos primeras jornadas de la Segunda División, su salida del cuadro azulgrana era cuestión de tiempo y la Cultural se salió con la suya para cerrar un contrato por una campaña y una segunda opcional.

El asturiano se une a la lista de ex jugadores de la Ponferradina que ahora vestirán de blanco, como Leandro, Castañeda, Menudo y Dani Pichín. En las últimas cuatro temporadas en Almendralejo fue pieza importante en el ascenso, el segundo en su carrera tras la històrica tarde del Ramón de Carranza donde el CD Lugo de Quique Setién rompió moldes. Aitor ya había debutado en la liga de plata en el Guadalajara y su formación se vincula al Racing de Santander. Dicen los que le conocen que su edad no es obstáculo para un estado físico óptimo, a pesar de que en el último curso solo jugó doce encuentros, once como titular.

Este fichaje arrastra a José Antonio Soler, que este miércoles no entrenó con el resto de compañeros en Puente Castro. El discutido lateral quema sus últimas horas en el equipo leonés. No ha podido revertir una situación enquistada desde que compareció al inicio del curso en una evidente baja forma. Una situación que molestó especialmente a José Manuel Aira, que comparte representante (Rodrigo Lobelle) con el defensa valenciano. El avance de la pretemporada apenas cambió la idea del técnico, decidido a buscar una solución, a darle una alternativa más fiable y experta al puesto.

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Si Soler firmó por dos temporadas, hasta 2022 se comprometió Antonio López, el máximo goleador del equipo hasta la fecha y que también abrirá la puerta de salida semanas después de su entrada. El giro de planificación que sobre la marcha va a realizar el club impedirá que el andaluz pueda mostrar si está listo o no para calibrar su salto de Tercera a un gallo de la Segunda B. Ya hay equipos de la categoría de bronce que piden turno para aprovecharse de la cesión que va a plantear la Cultural. A sus 27 años, ¿tendrá el ariete la oportunidad de mostrarse en un futuro vestido de blanco?

Los fichajes con inmediata fecha de caducidad empiezan a ser una tónica habitual en la manera de hacer de la Cultural. Consumado el ascenso a la Segunda División, Rubén de la Barrera afrontó el fichaje de "Pito" Camacho, una operación realizada tres meses antes, con las dudas que generaba un delantero de nula experiencia en la división de plata. Un par de pruebas bastaron para confirmar su decisión inicial. Camacho fue visto y no visto y no debutó en partido oficial. Un verano después, Víctor Cea y su equipo llegaron de la mano de jugadores madrileños, como Fer Ruiz, al que se terminó dando puerta sin estrenarse de blanco. Como el meta Xabi Irureta. Y como si de una costumbre se tratara, la Cultural actual volverá a retractarse de sus propios fichajes. Futbolistas útiles en julio ya no encajan en agosto, con el coste consiguiente para las arcas, que ya sufrieron un desgaste al romperse los contratos de aquellos que, como Palatsi, Yeray, Hugo Rodríguez y Viti, cayeron en desgracia para dirigentes y técnicos. Y aún habrá que pagar la salida de Vicente Romero y Adrián Mancebo. 

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Llegará Aitor Fernández...y llegarán más. Podrían llegar a ser ¡19 fichajes!. En los últimos días de mercado la Cultural valora otras tres operaciones, dos atienden a necesidades defensivas (central y lateral izquiedo) y una, para relevar a López, está enfocada al ataque. Candidatos, varios. El boliviano Roberto Carlos Fernández para el costado zurdo y para el eje de la cobertura y la delantera se amplían horizontes sin descartar una nueva mirada al fútbol extranjero.