El Gobierno inaugura un CADE en Málaga que permitirá acoger a 230 personas
Es el séptimo centro de estas características en España y complementará la actividad que desarrolla el CATE

La ministra de Migración, Magdalena Valerio, inaugura el CADE junto a Cruz Roja / Toni Asenjo

Málaga
El Gobierno de España, a través del Ministerio de Migración, ha inaugurado esta mañana un Centro de Atención, Derivación y Emergencia (CADE) en la Avenida Ortega y Gasset con capacidad para acoger a 230 personas. Este espacio de atención primaria proporcionará comida, alojamiento y ropa, además de ejecutar reconocimientos médicos, durante un período estimado de entre una y dos semanas. Se trata de una estancia previa durante la cual se estudiará la situación en la que llegan los migrantes para posteriormente derivarlos a otros centros de acogida, siempre y cuando hayan solicitado la petición de asilo y estén amparados por los convenios internacionales, subrayan desde el Gobierno.
Este CADE, el séptimo de estas características que se pone en funcionamiento, será financiado con fondos públicos del Ministerio de Migración y gestionado por Cruz Roja, que está al frente de más de la mitad de los emplazamientos adecuados para la ayuda humanitaria en todo el territorio nacional. Asimismo, también dispone de la cooperación con diversas ONGs. Del mismo modo, en el puerto de la ciudad se ha instalado una veintena de módulos que vienen a complementar la función que desarrolla el Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE).
La ministra de Migración, Magdalena Valerio, ha acudido al acto y ha defendido la política migratoria encabezada por Pedro Sánchez: "Este Gobierno se ha tomado la migración con seriedad. Pretendemos que existan unas infraestructuras dignas, cumplir con las normativas de derechos humanos y dar una atención digna a las personas que vienen a nuestro país huyendo del hambre, de la miseria, las guerras, las persecuciones y la enfermedad". Por último, ha querido recordar que España fue un país de emigrantes por razones políticas y económicas y, por tanto, debe mostrar su solidaridad y hacer frente a la ayuda humanitaria.