El Concello visita la reforma de Río con peñistas del Celta
Los aficionados reiteran la incomodidad de algunas butacas
Vigo
De la mano del concejal de Deportes, Manel Fernández y de la concejala de Fomento, Patricia Rodríguez, peñistas del Celta han acudido a Balaídos para ver de primera mano cómo van las obras en la Grada de Río y comprobar también los asientos de la discordia.
El concejal de Deportes asegura que "se trata de una reforma muy importante financiada por la Diputación y el Concello de Vigo y los ingenieros han explicado que se gana en comodidad ya que la distancia es la misma que había antes, y el problema radica en la forma de los asientos que cumple la normativa".
A las peñas se les ha transmitido también que se han mejorado los accesos para las personas con movilidad reducida, se ha mejorado en vecacuaciones pero las butacas, como señala Gustavo Agulla "se van a quedar igual que estaban y algunas generan problemas en función de la estatura, es una sensación de incomodidad. El que llegue segundo no podrá encajar las rodillas". Señala Alberto Baquero que la pena es que "es el resultado final de una obra que nos va a durar años y es un resultado malo. No todas las filas tienen la misma distancia y nos encontramos con problemas de centímetros, pero hay filas en las que pasas de estar medianamente cómodo a no entrar".
El problema que encuentran, y agradecen las explicaciones de los ingenieros, es que no hay una solución. Les hubiera gustado que esas explicaciones se las hubieran ofrecido al Celta. Creen que solo ellos, Celta y Concello, pueden resolver los problemas de Balaídos y también sus diferencias.