La tierra que tapó a Julen la arrastró el pequeño en su caída al pozo de Totalán

Málaga

El análisis de las muestras confirma que el pequeño Julen quedó atrapado bajo un tapón de tierra que arrastró en su caída al pozo de Totalán.

Son las conclusiones del informe de la Unidad de Medio Ambiente de la Guardia Civil que ha empleado más de cuatro meses en realizar este documento. El objetivo era doble: confirmar que no hubo piedras que pudieran causar la muerte del pequeño tras caer en pozo y descartar la teoría de que podía haber sido enterrado a propósito.

Se han analizado un total de 24 muestras tomadas de la zona que rodeaba el sondeo, de la parte superior, lateral e inferior del punto en el que quedó atrapado Julen a 70 metros de profundidad, de restos encontrados en la mano y en el esófago del menor e, incluso, de la cuba empleada para depositar los restos de la arena que se aspiró en el sondeo para liberar el tapón de tierra bajo el que quedó el pequeño.

El análisis es concluyente: de las 24 muestras, 23 contienen restos minerales compatibles con los que se encuentran en la zona, sólo una de ellas, la extraída de la cuba del camión, difiere del resto pero, en el informe la Guardia Civil lo atribuye a materiales depositados anteriormente en el vehículo.

El juzgado del caso Julen dictó, el pasado 1 de julio, el procesamiento de David Serrano, el dueño de la finca de Totalán, como presunto autor de un delito de homicidio por imprudencia grave, la Fiscalía pide para él, por este delito, una pena de tres años de prisión, su defensa ha recurrido el auto del juzgado.

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