Navantia entrega el petrolero 'Monte Ulía' anunciando nueva carga de trabajo

Cádiz

Navantia Puerto Real ha entregado en tiempo y forma los cuatro petroleros tipo 'Suezmax' que le encargó el grupo vasco Ibaizábal. El último de los hermanos ha sido botado hoy en el astillero, con la presencia de las principales personalidades de la Bahía de Cádiz.

El 'Monte Ulía' tiene 274 metros de eslora, 48 de manga y pesa 156.000 toneladas. Con una capacidad de 175.000 metros cúbicos de petróleo, pertenecerá a la compañía energética francesa TOTAL. En su construcción se han empleado más de 20.000 toneladas de acero, y Navantia ha incorporado una innovación, incorporar piezas impresas en 3D al buque. 

El megaproyecto, que se inició en 2015, ha supuesto 8.000 puestos de trabajo directos, unos 2.000 por cada uno de los cuatro buques, el Monte Udala, Monte Urbasa, Monte Urquiola y, finalmente, este último, el Monte Ulía.

El ministro de Fomento, José Luis Ábalos, que ha estado presente en la botadura, ha puesto en valor la capacidad de trabajo del astillero puertorrealeño y las "miles y miles de horas de trabajo que han devuelto la esperanza a miles de familias, que ha revitalizado la economía local y que ha inyectado una buena dosis de optimismo al sector". Ábalos, además, ha insistido en la trascendencia que tiene la consecución del encargo: "La botadura del Monte Ulía supone, además, la reválida aprobada con sobresaliente de una naviera que ha demostrado que puede competir internacionalmente con la competencia en la liga de la construcción de petroleros", ha apuntado el ministro de Fomento. 

Por su parte, la presidenta de Navantia, Susana de Sarriá, ha anunciado el contrato que ha firmado la compañía para la reparación de cinco grandes cruceros "los próximos meses y a lo largo de 2020". Una garantía de carga de trabajo que, si bien no es la especialidad del astillero, dedicado principalmente a la construcción civil, garantizará, según de Sarriá, "el empleo para unas 1.200 personas, la mayoría de ellos de la industria auxiliar".

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En su discurso, la presidenta de la compañía ha explicado que la intención de Navantia es convertir al de Puerto Real en un astillero de referencia en eólica off-shore, enumerando, como prueba de ello, los tres contratos que ya hay firmados y que generarán en torno a lso 800 empleos. El primero de ellos, una subestación para un campo de Noruega, de la empresa AIBEL, el segundo la construcción de 20 'upper jackets' para un macroproyecto eólico en el Mar del Norte y, por último, el contrato para construir una estructura flotante para eólica off-shore.

Cifras a las que hay que incluir también los 1.000 empleos que generarán la construcción de los bloques para las corbetas de Arabia Saudí y que, según Navantia, equivalen a dos buques completos en cuanto a horas de trabajo.