El beso de la reliquia
Leire Fonseca.13 años
Bilbao
No entendía por qué había tanta gente en esa sala. Todo el mundo haciendo lo mismo, con el mismo objetivo. A mí siempre me habían dicho que era lo correcto; seguir a los demás, hacer lo que todos hacían. Cuando entré la vi. Era la reliquia de la que mi abuela tanto nos había hablado. Había una mujer besándola. Mi hermano y yo no lo comprendíamos. ¿Qué sentido tenía besar un objeto? Estaba el cura del pueblo, al que todos adoraban. A mí, aquel hombre no me terminaba de gustar. No trataba bien a mi familia, pero se lo callaban; me dijeron que eso era algo que no se podía contar a nadie.