Pantxo
Fabián Alcázar Martínez
![](https://cadenaser.com/resizer/v2/NEE6JV4MABP5DOPKSZVM4CKINE.jpg?auth=2c135f6f1b6a8dbd1103a522da44d941eaa9d764ec9312bf8a21071c9ecc3e8d&quality=70&width=736&height=414&smart=true)
00:00
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Bilbao
Ser perro no es fácil. Te encargas de vigilar y controlar la casa, sacar a pasear a tu humano y hacer vida social. Desafortunadamente están los baños, de los que huyo, pero, a pesar de ello, disfruto de comida y muchas camas donde retozar. No olvido mi tarea más importante, proteger a los miembros de este hogar, aunque se diga que solo soy una “bola de pelo de 5 kilos”. Un día tuve el presentimiento de que algo pasaba. Escuché ruidos en la puerta y corrí por el pasillo alertando con mis ladridos. Al llegar a ella unas manos me atraparon. Antes de poder reaccionar me vi en medio de la bañera con el agua cayendo sobre mí. Así aprendí lo que para el humano es eso que llama “estrategia”.