Los 130 millones de Pedro Sánchez

Palencia

Más de 130 millones de euros le van a costar a todos los españoles la gracia del presidente del Gobierno. No solo ha demostrado que la moción de censura que le llevó a la Moncloa fue un gran error, sino que, en el momento en que el castillo de naipes que había construido con separatistas y populistas se ha venido abajo, tampoco ha sabido tener la grandeza necesaria para convocar las elecciones generales pensando en los intereses de todos los españoles y se ha dejado guiar por motivaciones claramente partidistas.

Alrededor de 130 millones de euros costó la organización de las últimas elecciones generales, a los que hay que sumar también las aportaciones a los partidos políticos, que se elevan por lo menos a otros 40 millones de euros. Y esto es lo que le va a costar a todos los españoles la decisión de Pedro Sánchez de convocar las elecciones generales el 28 de abril; una decisión difícilmente comprensible para el común de los ciudadanos, a la vista de que en menos de un mes tendrán que volver a las urnas.

Y no creo que valgan justificaciones tan pobres como las que aseguran que si se juntasen todos los comicios en un ‘superdomingo’ electoral sería un verdadero problema de organización, que además confundiría a los ciudadanos, porque habría que instalar hasta cinco urnas diferentes, para los Ayuntamientos, las Cortes autonómicas, el Parlamento europeo, el Congreso y el Senado. Incluso en el archipiélago canario tendrían que instalarse urnas para los Cabildos insulares.

Pero qué pretenden que creamos, que los españoles somos tontos y nos vamos a hacer un lío porque haya muchas urnas y no vamos a saber ni a lo que estamos votando.

Es absurdo, es una justificación bastante pobre para tratar de esconder que el único motivo de que las elecciones generales no coincidan con las municipales y autonómicas es por los intereses electorales del Partido Socialista.

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Los barones territoriales del PSOE no quieren ni oír hablar de un superdomingo en el que los comicios autonómicos estén condicionados por la dinámica nacional, con un Partido Socialista en claro declive.

Intereses electorales que nos van a costar a todos los españoles más de 130 millones de euros. Pero qué buen uso daríamos cualquiera de nosotros a esa cantidad ingente de dinero. Yo tomo nota.