La patronal asturiana del transporte, Cesintra reduce al 10% los portes de carbón de importación a Compostilla y La Robla
El anuncio de cierre de ambas térmicas ha convertido en residual una actividad que hace medio año suponía el 80% de la carga laboral de los transportistas asturianos
Camioneros parados frente a la térmica de Compostilla durante las protestas mineras / Archivo Radio Bierzo
Ponferrada
La patronal asturiana del transporte, Cesintra ha rebajado a entre un 10 y un 20% sus portes de carbón de importación hacia las térmicas de Compostilla y La Robla, una tarea que hace apenas medio año suponía el 80% de su actividad.
Cerca de 300 familias dependen de la actividad de esta central del transporte que ha visto caer en picado la carga de trabajo desde el anuncio de cierre de las últimas centrales térmicas. Y es que a las de Compostilla y La Robla, se unen las asturianas donde sólo se mantendrá la de Soto de Ribera que transporta por ferrocarril el carbón de importación. El presidente de Cesintra, Alejandro García reconoce que los transportistas tratan de 'reconvertirse a marchas forzadas' porque la desaparición de su principal recurso es un hecho.
Lamentan también que el actual Gobierno se haya embarcado en una 'carrera alocada' hacia la denominada transición justa sin tener en cuenta el necesario periodo de adaptación que requieren quienes viven directamente de la minería o el sector de la energía térmica. De ahí que García vea en un cambio de Gobierno tras las elecciones generales 'un pequeño margen de maniobra' para quienes hasta la fecha vivían del carbón.
'Igual alargan un poco más los plazos y podemos reordenar el sector de forma adecuada, además también sería necesario contar con ayudas para modificar las bañeras ahora destinadas únicamente a la carga de carbón' señaló García.
