Maternidad
Sheila Arnaiz
Bilbao
Hace tiempo soñé con tener una vida perfecta, estar junto a la persona que amaba y con nuestro hijo. Teníamos una pequeña casa en el campo no muy lejos del pueblo. Vivíamos de la agricultura y la ganadería, mientras la pobreza asolaba al resto de aldeanos, aquella pobreza era consecuencia de la guerra. Desgraciadamente, todo lo que nos hacía felices desapareció poco a poco, incluyendo nuestra sonrisa. Mi marido tuvo que ir a la guerra y desafortunadamente murió. En estos momentos sólo busco protección para mi hijo y para mí que, tumbado sobre mí en este sencillo sofá, únicamente quiero que despierte de este horrible sueño.