Nueve ayuntamientos de Cantabria siguen sin cumplir la Ley de Memoria Histórica
El Ministerio de Justicia les pide que eliminen todos los vestigios franquistas de sus calles
Santander
Los ayuntamientos cántabros requeridos por el Ministerio de Justicia para que eliminen todos los vestigios franquistas de sus calles han defendido que están cumpliendo con la Ley de Memoria Histórica, aunque en algunos de ellos todavía quedan monumentos o calles que recuerdan a la dictadura.
En concreto, el Ministerio ha requerido por carta a 656 municipios españoles, entre ellos, nueve cántabros (Santander, Selaya, Comillas, Laredo, Medio Cudeyo, Santoña, Ramales de la Victoria, Suances y Cillorigo de Liébana) para que cumplan con la Ley de Memoria Histórica y retiren cualquier vestigio franquista de sus espacios públicos.
La alcaldesa de Santander, Gema Igual (PP), respondió el 31 de enero a una carta del Ministerio de Justicia adjuntando un informe de su Servicio de Cultura en el que se detallaban todos los pasos dados en esta legislatura para cumplir con la Ley de Memoria Histórica en la ciudad.
Según han informado a Efe desde el Consistorio santanderino se ha abogado por la aplicación de esa ley de manera "progresiva" y desde la "normalidad democrática, social e institucional" y se trabaja desde hace años en su cumplimiento guiado "por el criterio de los expertos".
En la capital cántabra, según el Ayuntamiento, ya no queda ningún monumento en la vía pública, mientras que cerca de una docena de calles esperan nuevos nombres.
En el caso de Santoña, su alcalde, Sergio Abascal (PSOE), ha explicado que, tras recibir la carta del Ministerio de Justicia, se va a consultar al secretario municipal cómo actuar en el monumento en recuerdo a Luis Carrero Blanco, presidente del Gobierno de Franco, nacido en este municipio.
El alcalde de Medio Cudeyo, Juan José Perojo (PRC), ha asegurado desconocer "a qué se refiere" la carta, porque el Ayuntamiento cambió en 2016 los nombres de las tres calles que quedaban, lo que el Consistorio va a comunicar a la Dirección General para la Memoria Histórica.
En Comillas tampoco queda ningún vestigio franquista desde 2003, según ha explicado su alcaldesa, Teresa Noceda (PRC), al igual que ocurre en Ramales de la Victoria, donde su regidor, César García (PSOE), se ha quejado de que aplicaciones de internet como Google Maps no han actualizado los nombres de las calles, que aparecen con su anterior denominación.
Laredo está llevando a cabo un estudio para conocer que calles incumplen la Ley de Memoria Histórica para elevar al pleno la necesidad de renombrar aquellas relacionadas con el franquismo para darles nombre de mujer, como han sugerido desde un centro escolar, según señala su alcalde, Juan Ramón López Visitación (PSOE).
El alcalde de Suances, el socialista Andrés Ruiz Moya, explica que el Ayuntamiento no ha recibido aún la carta del Ministerio, pero que trabaja desde hace tiempo en cambiar la nomenclatura de las calles que hacen referencia al franquismo, aunque es algo que se tiene que hacer "poco a poco".
Ruiz Moya explica que se ha hecho una "prueba piloto" con una calle con solo 20 vecinos, la calle 18 de julio que ahora se denomina Las Canteras, pero que otras como la calle José Antonio, que es una de las principales, con más de 300 vecinos, tiene que cambiarse con más tiempo, porque eso supone muchas modificaciones de direcciones para las gestiones diarias.
Quien en la tarde del miércoles aún no había recibido aún la carta es el alcalde de Selaya, Cándido Cobo (PP), aunque no tiene constancia de que en el municipio queden vestigios franquistas, por lo que no descarta pedir a la Dirección General para la Memoria Histórica que detalle a cuáles se refiere.
Una vez que se informe al Ayuntamiento de esos vestigios, Cobo ha señalado que se realizarán informes jurídicos y se investigará para confirmar si los elementos a los que se refiere el Ministerio "están afectados" por la Ley de Memoria Histórica para cumplirla.
Tampoco tenía conocimiento de esa carta esta tarde el alcalde de Cillórigo de Liébana, Jesús María Cuevas (PP), al que no le consta que haya ningún vestigio relacionado con el franquismo en este municipio de unos 5.000 habitantes.
De todos modos, ha precisado que los 18 pueblos del municipio son pequeños y sus vecinos no saben cómo se llaman las calles y "en casi ningún caso tienen la placa con su nombre".