La soledad de las librerías

Vigo

El año pasado, cerraba la librería más antigua de Vigo: después de 69 años abierta, bajaba su verja definitivamente. El cierre de los negocios literarios es habitual en los últimos años, obligados a competir en desigualdad con el aumento de los pedidos por internet, con el libro electrónico y con las grandes superficies.

La opción es reinventarse, ofrecer más opciones que a los que se acerquen a unos negocios que luchan por sobrevivir. Eso es lo que ha hecho la librería Versus; su dueña, Sabela Martínez, optó por conciertos, presentaciones de libros o exposiciones de arte. Aunque asegura que la labor del librero sigue siendo imprescindible, sobre todo para los clientes más habituales."Muchas veces, estás leyendo una novela y ya estás pensando a qué cliente se lo puedes recomendar". Esa labor también tiene que batallar contra las búsquedas en Google, tratando de encontrar gustos comunes publicados en la red.

"El enfermo es crónico", asegura Sabela, en referencia a la situación de las librerías. Pero tiene pulso. Sólo hace falta entrar en una librería para sumergirse en un espacio diferente, con estanterías repletas de historias, escaleras para tocar lo inalcanzable e inhalar el aroma del libro nuevo, de las páginas con urgencia de ser leídas.

Habrá que perder el miedo a las librerías, que será la única solución para que el pulso, aunque débil, no deje de tamborilear.