Y a partir de mañana a 90
La Firma de Maribel Campos
"Y a partir de mañana a 90", la Firma de Maribel Campos
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Palencia
Prepárense si son conductores habituales de carreteras convencionales, porque a partir de mañana entrará en vigor la nueva medida de la Dirección General de Tráfico que reduce a 90 kilómetros por hora el límite de velocidad permitido. Son la mayoría de las carreteras autonómicas, aquellas en las que hasta ahora se podía circular a 100 kilómetros por hora, pero que desde mañana bajarán a 90.
La Dirección General de Tráfico argumenta que la medida se adopta por razones de seguridad, dado que es en este tipo de vías en las que más accidentes mortales o con heridos graves se producen a lo largo del año. El argumento de las víctimas siempre parece irrebatible. ¿Quién va a poner en cuestión una medida encaminada a salvar vidas? Parece innegable, pero puede no serlo. De hecho, no son pocas las voces que se oponen firmemente a esta decisión. Y algunas se han alzado precisamente en nuestra provincia.
El Ayuntamiento de Guardo, afectado directamente, se ha pronunciado en contra, al entender que la rebaja del límite de velocidad supondrá un nuevo revés para la localidad, al alejar aún más este municipio de la capital palentina. Su alcalde, Juan Jesús Blanco, alerta, los guardenses han cambiado su punto de referencia para efectuar sus compras o buscar el acceso a otros servicios públicos, cambiando Palencia por León, ya que los radares de tramo instalados en la CL-615 y ahora la reducción de la velocidad se convierten en auténticos frenos a la hora de encaminarse hacia la capital palentina desde esta comarca.
Esto es solo un ejemplo, pero resulta indicativo. ¿Realmente, rebajar la velocidad máxima en 10 kilómetros por hora va a solucionar el problema de los accidentes de tráfico o solo es un espejismo?
¿No sería mucho más efectivo invertir más dinero en la mejora de estas carreteras convencionales, reparando de verdad sus firmes y no solo con parches en los socavones? ¿No sería más adecuado que los Presupuestos de las diferentes administraciones públicas se dotaran todos los años de los fondos necesarios para el mantenimiento de estas carreteras, para ensanchar los arcenes, para eliminar los puntos negros, reparar las zonas mal peraltadas o corregir algunas curvas?
Con estas medidas, estoy convencida de que no sería necesario rebajar la velocidad y lo dice una conductora habitual que a partir de mañana tendrá que poner el limitador a 90 kilómetros por hora.