Un hombre salva la vida en Cazorla gracias a dos jóvenes enfermeros que se hallaban de vacaciones
Sufrió un ataque al corazón y entró en parada cardiorespiratoria en el restaurante donde se disponía a comer con su familia
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El policía, Javier Fábrega, y los enfermeros Antonio Sánchez y Eva Cirre / DIEZ TV
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Cazorla
Dos jóvenes enfermeros ayudan a mantener con vida a un hombre de 59 años que acababa de sufrir una parada. El masaje cardiaco que realizaron más la rápida llegada de la Policía Local de Cazorla con un desfibrilador, mientras llegaba el equipo de urgencias del Centro de Salud cazorleño marcaron la diferencia entre la vida y la muerte para este turista de Madrid.
Procedentes de Madrid la familia compuesta por el matrimonio, Rafael Romero y María de Los Ángeles Monzón, y dos hijos de 14 y 16 años llegaban a las cuatro de la tarde, dejaron el equipaje en el apartamento rural y buscaron un lugar donde poder comer a pesar de la hora. Lo encontraron en Taberna Quinito en la plaza de Santa María y en pleno casco histórico de la ciudad. Allí cuando se disponían a comer y según el gerente del establecimiento “el hombre pidió un vaso de agua porque dijo sentirse algo mal”, y a los pocos segundos se desplomó.
En ese momento el caos se adueñó de la terrible escena en la que nadie sabía qué hacer. La llamada al 112 movilizó a la Policía de Cazorla que con celeridad llegó al lugar. Para entonces una joven pareja de enfermeros, que se encontraban en el local de enfrente habían sido alertados del suceso y ambos luchaban ya por la vida del hombre practicando la reanimación cardiorespiratoria manual.
El Cazorleño Antonio Sánchez Herrera es enfermero de la UCI de pediatría del hospital universitario Son Espases de Palma de Mallorca donde también trabaja su esposa granadina, Eva Cirre. Ambos están pasando las fiestas navideñas con la familia, cuando en el primer día del año se convertían en los ángeles de la guarda del afectado.
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Javier, Antonio y Eva en la Plaza de Santa María donde lograron salvar la vida de Rafael / MJBayona
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Javier, Antonio y Eva en la Plaza de Santa María donde lograron salvar la vida de Rafael / MJBayona
Cuenta Antonio Sánchez que en su profesión se enfrenta día a día muy estresantes donde se ha de imponer la serenidad, “tienes que tener unos nervios de acero y un serio conocimiento de cuáles son tus aptitudes y actitudes ante determinados escenarios y en ese momento solo te centras en el paciente”. Cuenta que entre él y su mujer realizaron las primeras maniobras de RCP (Reanimación Cardio Pulmonar), destacando que fue providencial que llegase la policía con el equipo desfibrilador. “Que hizo la función que necesitaba el hombre en ese momento”. No reaccionó a la primera descarga pero sí a la segunda.
“En una parada cardiorespiratoria la reanimación básica es crucial para el desenlace final”, confirma el sanitario. Por ello ha aprovechado para hacer un llamamiento para que se haga más rutinario el conocimiento de una RCP básica por toda la población” y disponer de más desfibriladores no solo por la policía local sin que debería de haber en más locales públicos y que todo el mundo debería de saber manejar”.
Por otro lado, Antonio Sánchez ha aprovechado para poner sobre la mesa “que el sistema sanitario andaluz es deficitario y eso tiene que cambiar urgentemente”. Porque como dijo, en Cazorla se cuenta con un hospital que debería haber estado terminado en 2009 y aún no está abierto, “y claro no es lo mismo la calidad asistencial y rápida que se pude dar por un hospital a 50 km en Úbeda como en uno a 500 metros en Cazorla”. Señalando las deficiencias de la ambulancia que llegó para el traslado de la que dijo textualmente “es necesario disponer de todos los recursos materiales necesarios porque la ambulancia parecía el camarote de los hermanos Marx”. De hecho, ambos sanitarios se encargaron de acompañar al enfermo hasta Úbeda junto al médico de urgencias.
Por su parte, Eva Cirre puso de manifiesto su asombro al comprobar que en Cazorla solo hay un equipo sanitario de urgencias en el centro de salud tras formularle la pregunta a la enfermera que vino con el médico de urgencias: ¿qué ocurriría si hubiera que acudir a otra emergencia? La respuesta fue que tendría que venir el equipo de Peal de Becerro o el de Santo Tomé, “esto me parece un crimen porque se pierde la oportunidad de salvar a alguien más en ese momento porque el tiempo es un factor fundamental en ese momento ”.
Por su parte, Javier Fábrega, uno de los policías que asistió la emergencia comenta si para algo ha servido este suceso es para que ahora se les dote de otro desfibrilador para llevar en el coche patrulla, “no es lo mismo que tengamos que ir a buscarlo que llevarlo ya en el coche y ganar esos minutos de tiempo tan necesarios y vitales en estos casos”.
Todo suma como indica el policía, porque ante la situación el taxista Sebastián Serrano se puso rápidamente a disposición de la familia para trasladarles a Úbeda tras ambulancia.
La casualidad de que un matrimonio de enfermeros se hallara en un local frente a donde sucedía y la rapidez de la policía que se presentó con el desfibrilador, fueron claves para salvar la vida de Rafael.
El hombre permanece estable en la UCI de Úbeda desde donde se le va a trasladar a la unidad de coronarias de Jaén.