Justos de nieve, pero abren
Formigal, Astún y Valdelinares inauguran este miércoles su temporada de nieve
Aramón
Jaca
En el Pirineo oscense, hay pocos kilómetros esquiables pero las estaciones de Formigal y Astún han podido comenzar por fin la temporada este miércoles. La afluencia de esquiadores ha sido escasa y los forfaits tienen precios reducidos hasta que puedan ampliar los kilómetros. En las estaciones llevaban más de 20 días esperando y han trabajado intensamente para, por lo menos, poder comenzar a funcionar.
Los espesores van de 20 a 50 centímetros en Formigal, que ha abierto con 8 remontes, 8 pistas y 10 kilómetros esquiables, conectando las tres zonas que tienen abiertas. En Astún, tienen espesores de entre 5 y 20 centímetros; han abierto 13 kilómetros y 17 pistas, cinco de ellas rojas. Ambos centros invernales recomiendan extremar la precaución y la velocidad con estas condiciones.
Cerler continúa abierta con 45 kilómetros y con espesores entre 30 centímetros y 1 metro. Candanchú no ha podido poner en funcionamiento la estación. Por el momento, la previsión no anuncia precipitaciones de nieve en más de una semana por lo que tanto las estaciones como la hostelería o el comercio de las zonas de influencia continúan mirando al cielo.
Se trata de una de las aperturas más tardías de los últimos años: son sólo 3 escasos kilómetros esquiables en las tres pistas abiertas este miércoles en Valdelinares. Aramón ofrece un precio reducido de sólo 18 € para los que quieran terminar el año esquiando. David Nadal, presidente de la Asociación turística de Gúdar Javalambre, asegura que pese a todo la situación no se nota en las reservas de fin de año.
La apertura de Javalambre tendrá que esperar. Desde la zona recuerdan que lo importante es el final de temporada y confían en que pronto llegue en el frío y la nieve a la comarca.
